En las calles polvorientas de Villahermosa, Tabasco, donde el calor sofocante forja caracteres indomables, surgió un diamante en bruto que desafió las expectativas del fútbol mexicano. Diego Lainez Leyva, el enano con pies de mago, como lo apodan cariñosamente, no es solo un extremo de regates imposibles; es la encarnación de la audacia juvenil que soñó con Europa y regresó para reclamar su trono en casa. A sus 25 años, con un contrato fresco y un físico que desafía las lesiones, Lainez sigue siendo esa promesa eterna, el chico que a los 16 ya hacía temblar defensas.
De las canchas de barro a la gloria azteca
En los potreros de Villahermosa. Diego Lainez nació el 9 de junio de 2000 en esa ciudad petrolera, hijo de Mauro Lainez y Mary del Carmen Leyva, en una familia humilde donde el fútbol era un sueño compartido. Su hermano mayor, Mauro Lainez, también futbolista en Mazatlán FC, fue su primer rival y compañero de aventuras. A los 11 años, el scout, Ángel González, los descubrió en un torneo local. Mauro optó por Pachuca, pero Diego, con esa intuición precoz, eligió las fuerzas básicas de Club América, mudándose a la Ciudad de México con su familia para perseguir al ave.
En La Cantera, bajo la tutela de entrenadores como Miguel Herrera, Lainez escaló como un huracán. Su zurda endiablada y explosividad, lo distinguieron desde Sub-15. Debutó en Copa MX a los 16 años, el 1 de marzo de 2017 contra Santos Laguna, y tres días después, en Liga MX ante León, convirtiéndose en uno de los debutantes más jóvenes de la historia americanista. No era un prodigio; era el futuro.
De América al viejo continente y vuelta a casa
La era dorada de Diego Lainez en Club América (2016-2019) fue un torbellino, 51 partidos en Liga MX, 5 goles y 2 asistencias, más destellos en liguilla. Tuvo temporadas clave como el Apertura 2018, con su doblete histórico contra Pachuca (3-1), el más joven en lograrlo para las Águilas. Ganó la Liga MX en ese mismo Apertura, su primer título grande, y aportó en la Copa MX del Clausura 2019.
La transferencia bomba se dio el 10 de enero de 2019, Real Betis pagó 14 millones de euros, el segundo fichaje más caro de un mexicano a Europa y el más joven emigrante de Liga MX. Firmó por cinco años, debutando en LaLiga contra Real Madrid.
En Betis (2019-2023), jugó 89 partidos entre liga y copas, con 4 goles y 8 asistencias. Temporadas irregulares como la 2019-20 (18 PJ, 1 gol), pero con minutos en Europa League, donde anotó el gol más joven de un azteca (contra Rennes, 2020). La pandemia y competencia feroz lo relegaron al banquillo. Préstamo a S.C. Braga (Portugal, 2022-2023) con sólo 153 minutos en Primeira Liga con 1 gol contra Arouca (6-0), pero frustración total; el préstamo se cortó prematuro. Regresó a México el 30 de enero de 2023, cedido a Tigres UANL por un año, que se extendió. En Tigres (desde 2023), acumula 70 PJ, 8 goles y 10 asistencias. Con los felinos consiguió la Liga MX en el Apertura 2023. De promesa a nómada europeo, y ahora, pilar felino.
Mundiales juveniles, bronce olímpico y sueños mayores
Diego Lainez es sinónimo de Tri en las nuevas generaciones. Debutó con la Selección Mexicana Sub-17 en el FIFA U-17 World Cup 2017 en India, anotando un doblete contra Inglaterra (3-2 derrota). Con la Sub-20, brilló en la CONCACAF U-20 2019 aunque los eliminaron en fase de grupos pero, su bronce en Tokyo 2020 Olympics es recordado por muchos. Con el Mundial 2026 en la puerta, Lainez no ha sido convocado al Tri y esa puerta poco a poco se va cerrando.
Premios que validan el talento
Más allá de trofeos colectivos, Lainez atesora distinciones que lo coronan como joya mexicana. Nombrado en The Guardian’s 60 Best Young Talents 2017, y en NxGn de Goal.com (2017-2019) como top adolescente mundial. En México fue Mejor Jugador Joven Liga MX 2018, y tiene el récord de ser el quinto goleador más joven en América. Con el Tri consiguió estar en el Best XI CONCACAF U-20 2019.
Sombras leves en un cielo brillante
Diego Lainez navega con timón firme, lejos de escándalos graves. La mayor “polémica” fue su elección de Betis sobre Ajax en 2019, criticada por expertos como Christian Martinolli: “Sacrificó desarrollo por fama; Ajax lo habría pulido”, dijo en YouTube. Lainez respondió con humildad: “Fue mi decisión; aprendí de los errores”. En 2021, ausencias por “problemas estomacales”, explicadas por Pellegrini como distracciones de la Selección, generaron murmullos, pero se aclararon como malentendidos médicos. Objetivamente, sin sanciones ni dramas; su bajo perfil evita controversias, aunque fans debaten si Europa lo “quemó” prematuramente.
Titular en Tigres, listo para 2026
Diego Lainez es indiscutible en Tigres UANL, con contrato hasta junio de 2027; en el Apertura 2025, acumula 11 PJ con 2 goles y 3 asistencias, dejando un poco de ser el Lainez que nos tenía acostumbrados.
Diego Lainez no es solo un regateador de élite; es el puente entre la promesa rota de Europa y el orgullo renovado de México. Su legado de títulos juveniles, bronce olímpico, y esa zurda que ilumina el Azteca, inspira a una generación que ve en él no al “qué pudo ser”, sino al “lo que será”. Así que por eso, es la prueba viviente de que los sueños, aunque se tuercen, siempre encuentran el camino de regreso.




