Resumen
Don Giovanni de Mozart sobrepasa el límite de la historia de un seductor castigado. En plena actualidad 2025, podemos experimentar esta obra como un intrincado espejo de la sociedad: una red de deseos, contradicciones y violencias compartidas por todos los personajes. Desde una mirada que comprende nuestros días, se trata de observar cómo el poder, el deseo y el control pueden atravesar y transformar a cada personaje que ensambla la ópera. Con un diseño visual suprematista (Malevich, 1913) y una dramaturgia que busca conmover y provocar, el montaje busca conectar con nuevas generaciones y revitalizar el interés operístico en Aguascalientes.
Justificación
En pleno 2025, hablar de Don Giovanni como una simple historia de castigo moral es insuficiente. Esta producción parte de la necesidad de resignificar el repertorio clásico desde lecturas actuales que atraviesan lo corporal, lo afectivo y lo simbólico. En esta ópera no existen víctimas, más bien voces activas con agencia emocional. Mozart compuso una partitura que nos permite desbordar etiquetas, explorar subjetividades y desatar nuevas interpretaciones.
Gracias al arduo trabajo de Alberto Carvajal, Sandra Durán y Daniel Romo, en dos años, el Taller de Ópera de la Universidad de las Artes se transformó en el impulso que reavivó en Aguascalientes el interés por este arte escénico. Este proyecto es la joya de la corona en ese movimiento operístico: proponiendo una experiencia visualmente impactante y emocionalmente resonante, han probado con su participación en Pedro y el Lobo de Prokofiev, que el concepto de lo suprematista en cuerpos que representan todo sin necesidad de escenografía o vestuario puede resultar en un éxito para la Universidad de las Artes y la OSA trabajando en conjunto para construir un gran espectáculo sin preocuparse por presupuestos extraordinarios.




