Juan Carlos Medina Alonso, mejor conocido como “El Negro” Medina, nació el 22 de agosto de 1983 en San Pedro, Coahuila. Fue un mediocampista mexicano que dejó legado en clubes como Atlas, América y Tijuana, destacándose por su entrega, visión, conexión con la afición y su paso por la selección nacional.
Primeros años y consolidación en Atlas
Medina comenzó su carrera en Académicos, el equipo filial de Atlas, antes de integrarse al primer equipo rojinegro. Su debut en la Primera División fue el 31 de agosto de 2003, en un partido frente a los Tecos de la UAG, aunque Atlas cayó 1-0.
Durante sus primeros años con Atlas, Medina se ganó el cariño de la afición por su entrega en el mediocampo y su compromiso con el club.
Caminos cruzados: América, préstamos y regresos
En el Torneo Apertura 2008, Medina fue fichado por Club América. Sin embargo, su primera etapa con las Águilas fue difícil para consolidarse: fue cedido en préstamo a Monterrey, donde contribuyó con 1 gol en aquel lapso.
También pasó a préstamo con San Luis, donde fue pieza importante para que el equipo clasificara a la Copa Libertadores en el torneo 2010-2011.
Regresó al América y retomó su nivel bajo la tutela de Miguel Herrera, siendo parte del plantel campeón del Clausura 2013.
En 2014 regresó a Atlas para cerrar su etapa activa con el club de sus amores.
En sus últimos años como jugador vistió también las camisetas de Tijuana y Lobos BUAP en calidad de préstamo o transferencia.
Selección mexicana y momentos internacionales
Medina debutó con la selección mayor el 10 de noviembre de 2004. A lo largo de su trayectoria internacional registró 13 partidos con el Tri, aunque no logró anotar.
Fue convocado para la Copa Mundial de la FIFA 2014, aunque una lesión lo dejó fuera del torneo justo antes de que arrancara.
Su rol con la selección fue más intermitente que protagónico, pero siempre fue considerado un refuerzo confiable cuando se le llamó.
Perfil, estilo de juego y legado
Medina se desempeñaba como mediocampista central, con visión para distribuir, inteligencias en el espacio y capacidad para sumarse al ataque ocasionalmente. Aunque no fue un goleador prolífico, su aporte en asistencias, recuperación y equilibrio era valorado por entrenadores y equipos.
Su palmarés incluye títulos importantes como el Clausura 2013 con el América.
Más allá de los números, Medina es recordado por su lealtad —regresó a Atlas en la etapa final de su carrera— y por ser un jugador que comprendía el valor de la camiseta que defendía.