A lo largo de la historia, el trabajo de los cuidados ha sido invisibilizado. A pesar de que los cuidados nos cruzan a todas las personas de alguna manera, sigue sin reconocerse su importancia para sostener la vida y para la marcha cotidiana de toda la sociedad. En México se han implementado algunas iniciativas, pero aún queda un largo camino por recorrer para asegurar que los cuidados sean reconocidos como un bien público.
¿Qué son los cuidados?
Son actividades que sostienen el bienestar físico y emocional. Actualmente, se dedican aproximadamente de 38.9 horas a la semana el trabajo de cuidados y más del 80% de los cuidados recaen en las mujeres, como resultado de los roles de género que han orillado hacia una feminización de los cuidados. Sin embargo, reconocer el cuidado como derecho significa entender que todas las personas en algún momento de la vida necesitamos de cuidados, y también tenemos la responsabilidad de cuidar a otros y de cuidarnos a nosotros mismos.
Fue a partir de la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer, celebrada en Beijing, China, hace tan solo 30 años, que se comenzó a visibilizar de manera global la profunda desigualdad que implica la distribución inequitativa de las tareas domésticas y de cuidado, por lo que se sigue luchando por una verdadera igualdad de género y el empoderamiento de todas las mujeres en todas partes. La diputada Patricia Mercado, referente en los derechos laborales y derechos de las mujeres, menciona que no hay un encuentro entre hombres y mujeres al momento de asumir estas responsabilidades, resaltando que es necesario una nueva distribución de los trabajos de cuidados.

Porque, ¿quién va a asumir el rol de cuidadoras cuando viene una población joven cada vez más reducida, con familias de uno o dos hijos, que seguramente no podrán dar estos servicios de cuidado a las personas adultas mayores dependientes o personas con discapacidad? ¿Quién va a cuidar a las adultas mayores cuando son ellas las que están cuidando a los adultos mayores? Hablar de cuidados es también hablar de las políticas de cuidado que el Estado debe ofrecer. A esto, Mercado agrega: “Son situaciones cada vez más complejas que necesitan movimiento, que necesitan capacitación y por eso también digamos estamos planteando la generación de una economía social, porque el cuidado nunca será un negocio, pero sí así como eran las estancias infantiles, digamos, pueden ser cooperativas, pueden ser empresas de capital social que pueden ofrecer con subsidios de los municipios, en fin, tenemos que arreglarlo como sociedad como estado, como país.”
De igual manera, la senadora Amalia García resalta que actualmente México cuenta con una insuficiencia de espacios y equipamientos para asegurar políticas de cuidado. Por ejemplo, en Ciudad de México, que tiene la mayor cantidad de estancias infantiles en todo el país, solo ofrece un 51% de espacios que cuentan con este servicio. ¿Qué pasa con el resto?
Es fundamental que el presupuesto público refleje de manera clara una asignación de recursos destinados al cuidado de las personas, desde la financiación de servicios como estancias infantiles, centros de atención para personas mayores o apoyos para personas con discapacidad. También, el reconocimiento, dignificación y retribución de quienes realizan trabajos de cuidado, tanto remunerados como no remunerados. Para lograrlo, se requiere el diseño e implementación de políticas públicas integrales que coloquen el cuidado en el centro de la agenda social, económica y de derechos humanos.
¿Qué medidas se han implementado?
La presidenta, Claudia Sheinbaum, ha trabajado en una propuesta que habla de un sistema de cuidados, en donde se incluye la implementación de estancias y becas, pero para Patricia Mercado, lo que realmente hace falta en el país, es mayor infraestructura, en donde el Estado también asuma su papel para cuidar. Hasta el momento, algunos estados como Estado de México, Ciudad de México, Aguascalientes y Jalisco ya reconocieron el derecho al cuidado, derechos de quienes cuidan y el autocuidado, mostrando un avance en materia de cuidados a nivel federal.
Algunas iniciativas que se han implementado son:
- Ley del Sistema Estatal de Cuidados
- La creación de órganos de gobernanza como el Comité Interinstitucional y el Consejo Asesor Ciudadano
- La garantización de un financiamiento serio con un mínimo del 2% del presupuesto y con cláusulas de no regresividad
- Obligar a dependencias y municipios a incluir acciones de cuidado en sus planes y en sus presupuestos
- Crear padrones estatales de beneficiarios y de personas cuidadoras tanto remuneradas como no remuneradas
- Impulsar políticas con responsabilidad y flexibilidad laboral para transformar la dirección del trabajo en los hogares
- La extensión de licencias de paternidad hasta por 1 mes
- La implementación de ofrecer servicios de salud para trabajadores, 1 día al año remunerado para que hombres puedan realizarse un examen de cáncer de próstata y que las mujeres pueden realizarse un examen de mamas, como prevención
Al final, todas las personas, en algún momento de la vida, necesitamos ser cuidadas. El cuidado es un derecho humano fundamental, y este derecho no puede seguir siendo sostenido y dirigido exclusivamente para las mujeres. Es urgente que surjan avances en la creación de infraestructura adecuada y en el diseño e implementación de una política pública real que reconozca, retribuya y garantice el derecho al cuidado para todas y todos.




