- Patricia Mercado reconoció avances en política social, pero criticó la urgencia en la aprobación de la reforma judicial sin diálogo plural
- Señaló omisiones graves en el combate a la corrupción, y cuestionó la protección de figuras como Adán Augusto y Cuauhtémoc Blanco
- Amalia García consideró que la actual política de seguridad es distinta a la del gobierno anterior y cuestionó la militarización impulsada previamente
Las senadoras Patricia Mercado y Amalia García ofrecieron un balance crítico del primer año de gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, señalando avances en materia económica y social, pero también errores en temas clave como la reforma judicial y la seguridad pública.
Patricia Mercado expresó que observó claroscuros en este primer año y destacó como aciertos la política de salario mínimo, los programas sociales y el hecho de que han salido 7 millones de personas de la pobreza, además de la postura firme del gobierno mexicano frente a Estados Unidos: “La presidenta, junto con su gabinete, la Secretaría de Relaciones Exteriores y la de Economía, han instrumentado una posición ofensiva frente al gobierno estadounidense. Esos son avances importantes”, comentó.
Sin embargo, criticó la premura con la que se impulsó la reforma judicial: “Pedíamos que se hiciera con tiempo, no que no se hiciera, sino que se hiciera con la inclusión de todos los actores y en pluralidad”, y reconoció como positiva la corrección que propuso la presidenta respecto a la reforma de amparo. “Ella está diciendo que no puede ser retroactiva y ya señaló que no envió esta reforma, porque lo que se busca hacer está fuera del marco normativo”, explicó.
En materia de igualdad sustantiva, Mercado valoró las reformas constitucionales para erradicar la brecha salarial, pero enfatizó que aún falta desarrollar leyes secundarias que permitan su implementación efectiva: “Falta desdoblar unas leyes secundarias para que no sea solo una constitucional que no tenga piso y no tenga manera de llevarse a cabo”.
Respecto a la seguridad, indicó que la dirigencia de Movimiento Ciudadano ha sido clara al señalar que la estrategia actual es más firme, aunque cuestionó el manejo de la corrupción: “Prometieron que la corrupción se barre de arriba para abajo y, sin embargo, sus cuadros de arriba están en la impunidad completa”.
Citó como ejemplo al senador Adán Augusto, de quien dijo “tendría que rendir cuentas”, y al exgobernador Cuauhtémoc Blanco, a quien calificó como “presunto violador” y criticó que no se le haya retirado el fuero.
Por su parte, la senadora Amalia García señaló que la presidenta ha adoptado una estrategia de seguridad distinta a la del sexenio anterior: “Antes se tenía en el centro la estrategia de ‘abrazos, no balazos’, pero no solo eso, sino que el anterior presidente incorporó a los militares en todas las áreas públicas del país. Creo que eso fue un grave error”, manifestó.




