- La Agencia Mexicana de Estudios Antárticos (AMEA) anunció el arranque de la Primera Campaña Científica Antártica Mexicana (CAMEX-1), un hecho histórico para el país al ser la primera ocasión en que México enviará un equipo propio de investigadores a la Antártida bajo su bandera.
Pablo Gerardo Torres Lepe, director de la AMEA, destacó la relevancia del hito: “Nunca México había mandado una comitiva, una campaña, un equipo de mexicanos con la bandera mexicana… siempre había sido a través de otros programas. Esta es una nueva era que detona la exploración antártica para México”, afirmó.
La participación mexicana será posible gracias a un convenio de cinco años firmado con el Centro Nacional de Ciencia Antártica de Ucrania, el cual permitirá a México utilizar la base Vernadsky, infraestructura, logística y rompehielos ucranianos. “Ucrania tiene una historia de ayudar a otros países a desarrollar sus programas antárticos… ahora se acercaron con nosotros a través de la embajada”, explicó Torres Lepe.
Los proyectos aprobados abarcan microbiología, geología y oceanografía, cada uno con metas precisas:
- Microbiología: estudio de extremófilos y su relación con la historia del planeta y el desarrollo de tecnologías biomédicas.
- Geología: análisis de registros del Jurásico y Cretácico para comprender el cambio climático pasado y proyectar escenarios futuros.
- Oceanografía: monitoreo del deshielo, biodiversidad y alteraciones de corrientes marinas.
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Torres Lepe advirtió que la Antártida se está calentando a un ritmo cuatro veces mayor que el resto del planeta: “Tiene consecuencias desde pérdida de hábitat, cambios en la reproducción de microorganismos y riesgos para las corrientes marinas. Todo está conectado… incluso México recibe agua profunda proveniente de la Antártida”, señaló.
El director recalcó que la investigación es un proceso lento, pero estratégico: “Traer las muestras es un reto… analizarlas toma tiempo. Pero esto consolida grupos de investigación, líneas de trabajo y formación de jóvenes”.
Agregó que el desarrollo de campañas continuas fortalecerá la posición de México en el Sistema del Tratado Antártico, un paso necesario para que el país pueda aspirar a ser miembro consultivo y, eventualmente, evaluar la instalación de una estación propia.
La CAMEX-1 incluye dos equipos científicos mexicanos. El primero está liderado por el doctor Rafael López y está conformado por la doctora Daisy Valera Fernández, el doctor Bruno Chávez, la doctora Teresa Pi Puig, la doctora Elizabeth Solleiro y el maestro Carlos Luna Osorno, quienes partirán este diciembre. El segundo equipo está liderado por la doctora Elsa Arellano-Torres y lo integran la doctora Laura Almaraz Ruiz (ENCIT), el doctor Juan José Karper-Zubillaga (ICML) y Enrique Isla (CSIC, España); este grupo viajará a finales de enero. Cada equipo permanecerá un mes en la Antártida.
Torres Lepe subrayó que esta campaña abre puertas inéditas para la comunidad científica mexicana: “Hacer ciencia es complicado en cualquier parte del mundo, pero no es imposible. No hay que perderse: las cosas no pasan de un año a otro. Los jóvenes son críticos para construir una base social y científica que justifique volver a la Antártida todos los años”.
La CAMEX-1 marca el inicio de una nueva etapa para la ciencia polar mexicana, con la expectativa de que este esfuerzo se consolide en futuras expediciones y alianzas internacionales.




