Esta semana será crucial para el tema de los cigarros electrónicos, ya que, después de varios rumores sobre este tema, por fin la Cámara de Diputados va a cerrar definitivamente la puerta al vapeo durante los próximos días, bajo una reforma que busca poner fin a la producción, importación, distribución y venta de vapeadores, luego de que se comprobara la magnitud del daño a la salud de los consumidores.
Cifras oficiales en México por parte de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) reveló que durante 2024 y 2025 el 6.5% de la población total usó vapeadores, con adolescentes que van desde los 10 a los 19 años.
La venta y consumo de vape está bajo la mira de los diputados que buscan reformar su prohibición total en México
Luego de que la Comisión de Salud aprobara el dictamen que plantea prohibir la venta en México de los cigarrillos electrónicos y vapeadores, la mesa directiva de la Cámara de Diputados publicó este 2 de diciembre el documento por el cual se espera que durante esta semana el tema sea discutido y votado en el pleno, en una reforma que propone cambios a la Ley General de Salud para establecer la prohibición total de cigarrillos electrónicos y vapeadores.
En este dictamen se define a estos productos junto con cualquier otro aparato o sistema electrónico, mecánico o de cualquier tecnología que sirva para calentar, vaporizar o atomizar sustancias tóxicas, ya sea que contengan o no nicotina, pero que sean diferentes al tabaco común y que sirvan para ser inhaladas por el usuario.
¿Qué plantea el artículo 282 Quáter en su reforma y cuáles son las multas y penas por la venta de vapes?
El artículo 282 Quáter que se encuentra planteado en la reforma indica que en todo el territorio nacional estará restringida tanto la adquisición, producción, comercialización, distribución e incluso la publicidad de estos dispositivos, aunque también hace mayor énfasis en los actos de importación, exportación, venta, suministro y promoción por cualquier medio, ya sea impreso, digital o audiovisual, así como cualquier medio o canal de comunicación.
Hasta el momento, las sanciones proyectadas para quienes incurran en este tipo de actividades podrían enfrentar hasta ocho años de prisión, junto con la posibilidad de una variedad de multas que podrían superar los 200 mil pesos. Entre estos puntos destacan los siguientes como los más relevantes de la iniciativa:
- Sanciones severas: penas que incluyen entre uno y ocho años de prisión para quienes violen la ley, junto con grandes cantidades de dinero en el pago de multas, dependiendo de la gravedad del asunto.
- Facultades de la COFEPRIS: refuerzo de atribuciones para vigilar productos considerados “peligrosos” y combatir el mercado ilegal de estos dispositivos en cualquiera de sus presentaciones.
- Industria farmacéutica nacional: A manera de prevención por los posibles problemas de salud derivados del uso de vapeadores, la iniciativa busca priorizar la producción de medicamentos en México.
Una oportunidad millonaria para el crimen organizado tras las recientes señales de prohibición
Algunos especialistas han advertido desde 2022 que, como consecuencia de la búsqueda de una prohibición total sobre estos productos, los vapeadores se han convertido en un nuevo negocio del crimen organizado, donde se estima que este tipo de bloqueos en su consumo y producción ha implicado una pérdida recaudatoria de hasta 20 mil millones de pesos en la actualidad.
Empresas tabaqueras como Philip Morris han denunciado pérdidas tributarias de millones de pesos al año derivadas de estos nuevos dispositivos, mientras que información por parte de la ENSANUT en 2022 ha reportado la venta de dispositivos pirata a más de un millón y medio de mexicanos, incluyendo a los menores de edad como uno de los sectores más vulnerables y de mayor consumo de cigarros electrónicos.
Una iniciativa que no es nueva y que lleva más de 13 intentos para acabar con el consumo de vapes en México
Durante su sexenio, en 2024, el presidente Andrés Manuel López Obrador presentó un paquete de 20 propuestas de reforma constitucional, en donde una de ellas estaba enfocada en la prohibición de cigarrillos electrónicos, vapeadores y cualquier otro instrumento relacionado con el tabaco que no fuera el cigarrillo común. Hasta este año, ya se habían sometido más de 13 iniciativas legislativas al Poder Legislativo para reformar la Ley General para el Control del Tabaco.
En la actualidad, no se necesita saber mucho sobre el tema para deducir que cualquier prohibición que haga el gobierno en torno a un producto solo alimenta la necesidad de consumo de manera ilegal, una oportunidad que aprovecha el narcotráfico para lucrar con sectores que dejan aún más desprotegidos a millones de jóvenes y adolescentes en el país, ya que no solo se trata de prohibir, sino de regular el vapeo y atender la causa de manera constante.
