- La CDMX enfrenta sentencias firmes por un contrato incumplido de 1999 que obliga a pagar millones por chalecos antibalas adquiridos en la gestión de Gertz
- La deuda ha generado multas, litigios y riesgo de arresto para jefas de Gobierno, pese a alegatos de falta de recursos para saldarla
- Un juez ordenó ajustar el pago al tipo de cambio actual y entregar chalecos equivalentes, así como emitir la carta de crédito pactada
La Ciudad de México sigue arrastrando la deuda millonaria que Alejandro Gertz Manero dejó desde 1999, cuando era titular de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina, debido al incumplimiento de un contrato para adquirir chalecos antibalas.
Esta deuda, cuyo pago ya fue ordenado por juzgadores locales y federales mediante sentencias firmes e inatacables, ha pasado por varias administraciones -Miguel Ángel Mancera, Claudia Sheinbaum, Martí Batres y ahora Clara Brugada-, todas ellas reacias a liquidarla. Además, ha generado más de 100 mil pesos en multas por incumplimientos.
El caso se remonta al contrato suscrito en 1999 con la empresa AP American Protective, S.A. de C.V., para la compra de 8 mil 995 chalecos antibalas que debían entregarse entre enero y febrero del año 2000. El pago acordado ascendía a 2 millones 17 mil 128.75 dólares.
La empresa cumplió con lo pactado: presentó la fianza requerida y realizó pruebas a los chalecos para demostrar que cumplían con las especificaciones técnicas. Sin embargo, el gobierno capitalino no entregó la carta de crédito necesaria para que la compañía pudiera cobrar una vez finalizado el proceso.
El 30 de noviembre de 1999, la SSP informó sobre una inconformidad presentada por otra empresa respecto a la adjudicación del contrato. Aunque ese procedimiento concluyó con un fallo favorable para AP American Protective, en ningún momento se ordenó suspender la ejecución del contrato.
Desde entonces, la administración capitalina mantuvo el incumplimiento y la empresa optó por demandar. A pesar de que la justicia ha ordenado en múltiples ocasiones el pago de la deuda, el gobierno local ha impugnado las resoluciones alegando falta de recursos y la imposibilidad de cumplir con las condiciones establecidas en 1999.
De acuerdo con resoluciones citadas por Proceso en su edición 2381, un juez federal determinó que la CDMX debía ajustar el pago a la realidad actual: cubrir el monto según el tipo de cambio vigente y recibir el número de chalecos equivalente al valor actualizado, cuya cifra se ha multiplicado con el paso de los años. Además, la administración deberá emitir la carta de crédito pactada a través de HSBC, banco que absorbió a Bital, entonces responsable de las cuentas del Distrito Federal.
La exjefa de Gobierno Claudia Sheinbaum fue multada tres veces por incumplir las sentencias y, para evitar una orden de arresto, tramitó un amparo argumentando que las medidas de apremio eran improcedentes.
Con el cambio de administración y el relevo de juzgadores federales y locales, algunos trámites se han retrasado, lo que ha impedido que la empresa avance en la ejecución de las sanciones. Hasta octubre pasado, el amparo de Sheinbaum contra la tercera multa seguía en trámite; por ello, la siguiente medida de apremio -el arresto- deberá aplicarse a la actual jefa de Gobierno, Clara Brugada.
