Imágenes de Aguascalientes
Fin de Fiesta; Fin de Año
Cronista del municipio de Aguascalientes
Termina el año; ya viene el fin de fiesta, o el fin de lo que se haya podido; de la vida. Unos sentirán nostalgia por ese instante; otros agradecerán que por fin haya llegado a su término, porque, de acuerdo al refrán reformado, escrito está que “cada quien habla del año según le vaya en él”.
Fin de año, fin de fiesta… A más de alguno la fecha nos invita a reflexionar sobre nuestro propio final, que nos gusta mucho pensar que será como en la imagen, un adentrarse en la luz. No de balde existe aquella antífona, tan socorrida en la remembranza católica de los fieles difuntos: “luzca para él la luz perpetua”.
¿Quién sabe?, a lo mejor no hay tal, sino la oscuridad definitiva, o la nada sin consciencia.
Por lo pronto venga este poema de Alejandro Aura, puesto a la disposición del público por Librado Jiménez, que le viene bien al año que lanza sus últimos estertores, o a quien se encuentra en el borde de la vida, sin regreso posible. Y dice:
“Así pues, en algún momento hay que cerrar la cuenta,/pedir los abrigos y marcharnos, aquí se quedarán las cosas que trajimos al siglo/y en las que cada uno pusimos nuestra identidad;/se quedarán los demás, que cada vez son otros/y entre los cuales habrá de construirse lo que sigue,/también el hueco de nuestra imaginación se queda/para que entre todos se encarguen de llenarlo,/y nos vamos a la nada limpiamente como las plantas, como los pájaros, como todo lo que está vivo un tiempo/y luego, sin rencor, deja de estarlo.
¿Se imaginan el esplendor del cielo de los tigres,/allí donde gacelas saltan con las grupas carnosas/esperando la zarpa que cae una vez y otra y otra,/eternamente? Así es el cielo al que aspiro. Un cielo/con mis fauces y mis garras.
O el cielo de las garzas/en el que el tiempo se mueve tan despacio/que el agua tiene tiempo de bañarse y retozar en el agua.
O el cielo carnal de las begonias en el que nunca se apagan/las luces iridiscentes por secretear con sus mejillas/de arrebolados maquillajes.
El cielo cruel de los pastos, esperanzador y eterno como la existencia de los dioses./O el cielo multifacético del vino que está siempre soñando/que gargantas de núbiles doncellas se atragantan y se ríen./Lo que queda no hubo manera de enmendarlo/por más matemáticas que le fuimos echando sin reposo,/ya estaba medio mal desde el principio de las eras/y nadie ha tenido la holgura necesaria para sentarse/a deshacer el apasionante intríngulis de la creación,/e modo que se queda como estaba, con sus millones,/billones, trillones de galaxias incomprensibles a la mano,/esperando a que alguien tenga tiempo para ver los
planos
y completo el panorama lo descifre y se pueda resolver./Nos vamos.
Hago una caravana a las personas/que estoy echando ya tanto de menos, y digo adiós”.
La imagen corresponde al Ferial de Aguascalientes de 2022, y quien se encamina hacia la luz entre rayos de sombra es el Primer Actor José Ángel Mejía Fuentes. (Felicitaciones, ampliaciones para esta columna, sugerencias y hasta quejas, diríjalas a [email protected]).




