Ciudad de México.- La presidenta Claudia Sheinbaum afirmó que México alcanzará un acuerdo “satisfactorio para ambas partes” con Estados Unidos respecto al cumplimiento del Tratado de Aguas de 1944, y aseguró que el país está en condiciones de avanzar en los compromisos sin poner en riesgo el abasto para la población ni la producción agrícola nacional.
Durante la Mañanera del Pueblo, la mandataria confirmó que este martes a las 14:00 horas se realizará una reunión binacional virtual entre autoridades de ambos países —con la participación de la Secretaría de Agricultura de Estados Unidos, así como la Cancillería y Conagua por parte de México— con el objetivo de revisar el avance en la entrega de agua del Río Bravo.
Sheinbaum explicó que el tratado establece entregas quinquenales y permite compensar volúmenes en el siguiente periodo cuando existen sequías severas, como ocurrió en el tercer y cuarto año del ciclo actual.
No obstante, destacó que entre 2024 y 2025 México incrementó de manera sustancial el flujo hacia Estados Unidos, reduciendo el rezago acumulado.
Subrayó que aún existe un faltante por entregar, pero que hay dos limitantes claras: garantizar el derecho humano al agua y el riego para agricultores mexicanos, y la capacidad técnica del sistema de extracción y conducción hacia territorio estadounidense, que no permite enviar más agua de manera inmediata.
“No es un asunto de mala voluntad”, insistió. “Queremos cumplir con el tratado, pero conforme a las condiciones hídricas y técnicas del país”, dijo.
Las declaraciones surgieron después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, amenazó con imponer aranceles de 5% a las exportaciones mexicanas en caso de incumplimiento del tratado.
Sheinbaum respondió que México siempre buscará “el mejor acuerdo posible”, entregando la mayor cantidad de agua disponible para los agricultores texanos sin comprometer el acceso al agua en territorio nacional.
La presidenta también aclaró que en su reciente reunión con Trump el tema no fue abordado, debido a la agenda apretada del mandatario estadounidense, quien solicitó un encuentro trilateral en lugar de una reunión bilateral.
Aunque en algún momento se consideró que Sheinbaum acudiera a la Casa Blanca, finalmente no fue posible, pero ambas partes acordaron programar una visita oficial a Washington próximamente.
Sheinbaum reiteró que el Tratado de Aguas de 1944 es benéfico para México y que el diálogo técnico y diplomático permitirá avanzar hacia un entendimiento mutuo. “Es un asunto de coordinarse y de entendernos. Confío en que llegaremos a un buen acuerdo”, concluyó.




