En la doctrina militar, también en el campo de la política, la Soberanía Nacional implica que el gobierno, a cargo del Estado, garantice la integridad del territorio nacional frente a los actores externos e internos, como lo afirma el general de división Carlos Demetrio Gaytán Ochoa (1948, Ciudad de México).
Quien fuera subsecretario de la Secretaría de la Defensa (SEDENA), con información de primera mano, sostiene que al día de hoy “aproximadamente el 30 por ciento del territorio nacional” está en control de los grupos del crimen organizado.
Y en estos espacios, donde el Estado mexicano no ejerce su soberanía, estos grupos tienen base social propia, que está en crecimiento, y ejercen “funciones de gobierno, como el cobro de impuestos o derecho de piso”.
Y también ponen a las autoridades en gobiernos de los estados y de los municipios al mismo tiempo que controlan, entre otras cosas, el tránsito por estos territorios y también el comercio y un amplio campo de las actividades productivas en esas regiones.
La presidenta Sheinbaum Pardo, en sus comparecencias mañaneras frecuentemente habla del tema de la Soberanía Nacional, a la que solo entiende cómo hacer frente a supuestas amenazas de actores externos, siempre en el marco de un discurso ideológico de propaganda política, pero nunca enfrenta la realidad de la toma del territorio, que ella no controla, por parte de los grupos del crimen organizado.
Ella, en los hechos, ignora esta realidad contundente y por lo mismo no lo enfrenta. En la versión del general Gaytán Ochoa, doctor en Alta Dirección, toca al gobierno y a las Fuerzas Armadas, al mando de su comandante en jefe, recuperar los territorios hoy bajo soberanía de los grupos del crimen organizado para “imponer, con el uso legal de la fuerza, las condiciones de paz y armonía requeridas”, que son obligación del gobierno.
Es a la comandante en jefe, sostiene el general Gaytán Ochoa, a quien corresponde “disponer de la totalidad de la Fuerza Armada permanente (…) para la Seguridad Interior y defensa exterior de la Federación (…)”. El garantizar la Soberanía Nacional requiere una Política de defensa que “devuelve a las Fuerzas Armadas su función constitucional y orgánica (…)”, sostiene el general Gaytán Ochoa.
A lo largo de más de un año de gobierno, a la presidenta Sheinbaum Pardo, nunca se le ha oído que reconozca la pérdida de la Soberanía Nacional, que viene de años atrás, en particular ante el espacio de acción que su antecesor dio a los grupos del crimen organizado, y nada tampoco sobre su propósito de recuperarla, y la estrategia que va a impulsar para que eso ocurra.
Tampoco se ha oído hablar de un tema tan relevante para la integridad de la Nación, al secretario de la Defensa, al secretario de la Marina y al secretario de la Seguridad Ciudadana. Al parecer ellos, al igual que su comandante en jefe, desconocen la realidad del país en la que viven y la pérdida de la Soberanía Nacional que es su responsabilidad garantizar. ¿Cuándo se harán cargo de lo que es su obligación? ¿Hasta cuándo seguirán evadiendo su responsabilidad?
@RubenAguilar




