Aunque todos nos emocionamos por la reciente noticia en la reforma de la jornada laboral, no podemos negar ni hacer caso omiso de que existen dos puntos importantes que son igual o incluso más relevantes antes de que podamos festejar, ya que el primero nos dice que dicha reforma será de manera gradual hasta completarse en el año 2030, y el otro nos plantea que, aunque exista esta reforma, no habrá aumento en los días de descanso a la semana.
Esta reforma propone, dentro de sus puntos clave, el registro electrónico de la jornada laboral, siendo la primera vez en la que la legislación del trabajo exija a los empresarios contar con un sistema como este para llevar un mejor control del número de horas laborales de sus empleados.

Aunque existe una disminución en las horas de la jornada laboral, esta no llega con la disminución del número de días de descanso
Aunque las iniciativas enviadas por la presidenta Claudia Sheinbaum al Senado plantean un límite de 40 horas semanales, se sigue manteniendo la posibilidad de trabajar seis días por semana, gozando de un solo día de descanso. Cabe señalar que esta pauta no estaba dentro de la iniciativa original que Movimiento Ciudadano puso desde un principio, en donde se señalaban dos días de descanso junto con la reducción de la jornada laboral.

En el proyecto de reforma a la Constitución, se señala que por cada seis días de trabajo las personas solo tendrán derecho a un día de descanso con goce de salario íntegro. A pesar de esto, en la Ley Federal del Trabajo sí se incorpora una disposición que expresa que la jornada laboral podrá ser distribuida de común acuerdo entre los dueños de las empresas y los trabajadores.
En el caso de los tres tipos de jornadas, no se ha planteado un cambio, ya que cada una de ellas se queda de la misma manera: la diurna permanece con un límite de ocho horas diarias, la nocturna con siete horas y la mixta con siete horas y media, mientras que el tiempo extraordinario o horas extras, sí jugarán un papel clave en la transición de los próximos cinco años para llegar a las 40 horas laborales.
¿Qué implicaciones tiene el hecho de tener una jornada laboral de 40 horas pero con solo un día de descanso a la semana?

En esta parte es donde la mayoría de los ciudadanos puede tener un descontento, ya que el hecho de que solo se tenga un día de descanso, implica un incremento de 9 a 12 horas en el tiempo extraordinario permitido, ya que, al igual que la disminución de la jornada, las horas extras también estarán en un aumento gradual hasta el año 2030, dejando de esta manera el calendario propuesto.
2026: 9 horas
2027: 9 horas
2028: 10 horas
2029: 11 horas
2030: 12 horas
Así que, para que entiendas mejor, prácticamente este cambio en la jornada laboral nos indica que cuando una persona trabaja más allá del límite permitido de horas extras, entraría en una categoría llamada “horas triple”, la cual tiene como objetivo que estas sean pagadas al triple del salario normal. Pero mucho ojo, porque incluso estas horas extras tienen un tope, ya que ante la ley no se podrá trabajar más de cuatro horas triple por semana, esto bajo ambos marcos legales.
La implantación de registros electrónicos laborales tendrá un papel clave en el nuevo modelo de la jornada laboral rumbo al 2030
Otro de los puntos que propone la actual reforma en la jornada laboral es añadir de manera obligatoria el uso de registro electrónico laboral de las horas que se trabajan en la jornada. Permitir que los empleados cuenten con este sistema, además de tener fines de un proceso más justo y claro en su trabajo, les agregaría la responsabilidad de compartir esta información con las autoridades cuando sea necesario.

Con este y los demás puntos anteriormente señalados sobre la nula disminución de los días de descanso, la reforma trata de evitar un cambio radical para el sector productivo, siendo una de las principales razones por las que optó por una ruta escalonada para quizá dar mayor tiempo a que las empresas se acomoden a este nuevo orden sin que existan desventajas ni para las empresas ni para los empleados en el país. ¿Será esta una buena decisión que logre beneficiar a ambas partes?




