Los que se quedan. Quienes no salimos de la ciudad, nos quedamos en Aguascalientes a gozar de la Feria Nacional de San Marcos en su edición 2014. Como todo en esta vida, nuestra Feria es un crisol, un abanico, un espacio polifónico y multicolor, por lo que no a todos nos gusta todo de ella.
Para esta politi-cocinera, la auténtica Feria está en la zona en torno al templo de San Marcos en donde tuvo su origen; es ahí en donde Usted puede pasear disfrutando el encanto del Jardín de San Marcos -ya sin las luces tipo antro que le fueron infortunadamente colocadas en la administración municipal próximo pasada- y de una Feria provincial y sencilla.
En torno al jardín de San Marcos encontrará el tradicional juego de Lotería Mexicana, en donde podrá pasar largas tardes colocando granos de maíz en las figuras que se van cantando; “el catriiiín, el nopaaal, el tambooor, la damaa” y si tiene algo de suerte podrá ganar un bonito premio como un muñeco de peluche, por ejemplo, o un adorno de porcelana, o un reloj de pared ¡En fin! Algún objeto simple, cuya finalidad no es despertar la codicia, sino preservar el gusto por nuestros juegos de antaño.
En el área del templo-jardín de San Marcos, encontrará los puestos de comida tradicional con cena mexicana como tacos dorados, enchiladas, pozole o sopes; habrá chascas (esquites), fruta fresca, tacos variados, aguas frescas, tortas y duros de harina preparados, entre otros antojitos. Encontrará la zona de juegos para niños pequeños y podrá disfrutar el espectáculo de Los Voladores de Papantla.
Si Usted gusta del futbol podrá acudir a demostrar sus habilidades en la gran zona de futbolitos instalada a un costado del Templo, o bien, si es Usted un gran romántico, podrá probar suerte en los juegos de destreza como los de encestar pelotas o derribar figuras de plomo, a cambio de obtener un regalo para su novia o esposa.
Ricas y variadas nieves podrá disfrutar en ese rincón de la Feria con su familia, ya sea de garrafa, del Popo, o raspados (hielo picado) de limón, de vainilla, de fresa o leche; o bien podrá adquirir, por unos cuantos pesos, una bolsita de papel marrón, repleta de pepitas de calabaza recién tostadas y bien saladitas.
Extensiones de nuestra tradicional Feria serían la Casa de la Cultura Víctor Sandoval, algo (no mucho) de la calle Venustiano Carranza, el tradicional Ferial de Aguascalientes -en un lugar muy, muy lejano de la Feria- y la Exposición Ganadera. Porque de ahí en más ¡Oiga Usted! queda poco de lo que fue nuestra fiesta. ¿Qué le puedo decir? La modernidad nos alcanzó y nos arrasó, de tal manera que los restaurantes, antros, zonas comerciales y demás son como los que encontrará en cualquier lugar y en todo tiempo ¡Vaya! Con decirle que en esta edición el otrora teatro del pueblo ya se llama algo así como el canal de las estrellas ¡Hágame Usted el favor!
Lo que no se acaba. A pesar de lo que digan las autoridades en esta feria no se acaban los desafiantes y abiertos abusos de los taxistas, no se acaba el lacerante trabajo infantil, no se acaba el consumo de alcohol en jóvenes cada vez más jóvenes ¡Vaya! niños y niñas consumiendo ante la mirada indolente de la vigilancia oficial (particularmente en torno al perímetro ferial).
Los robos a transeúntes, por momentos parecen estar fuera de control, porque sí, llegan los grupos de oficiales al lugar en que ocurrieron, pero para entonces ya no pueden hacer mucho puesto que los ladrones no se quedan -desde luego- a esperarlos.
Los “tocamientos” lascivos están en esta edición disparados en frecuencia como nunca antes (esta cocinera vivió mucho tiempo en el Distrito Federal y le juro que ni en el Metro presencié algo así) y a los jefes de familia no les queda sino aguantar porque recriminar al “tocón” es arriesgarse y arriesgar al resto de la familia y pues ¡A aguantarse el coraje! Y eso que le estoy hablando del horario fa-mi-liar. Me pregunto, ¿cómo será a altas horas de la noche?
La feria de ferias. A pesar de todo, la nuestra, es la gran fiesta. La tradicional y única Feria de San Marcos. ¡La Feria de Ferias! Para esta cocinera, vecina del Barrio de San Marcos, siempre será un placer ver pasar a las familias cuando caminan emocionadas con rumbo a la Feria. Siempre es hermoso ver las parejas de jóvenes enamorados que llegan a pasear. Siempre es alentador observar a los grupos de jóvenes que llegan y se retiran con su alegría natural, lejana de la embriaguez. Por todo ello y mucho más, vale la pena quedarse en Agüitas en abril y vale la pena formar parte, orgullosamente, de la Feria Nacional de San Marcos 2014.
Nos vemos la próxima. Recuerde que en mi cocina se come, se lee, se estudia y se conversa de todo… particularmente de política.
Cocina Política
Para quedarse en abril
Socorro Ramírez O
Los que se quedan. Quienes no salimos de la ciudad, nos quedamos en Aguascalientes a gozar de la Feria Nacional de San Marcos en su edición 2014. Como todo en esta vida, nuestra Feria es un crisol, un abanico, un espacio polifónico y multicolor, por lo que no a todos nos gusta todo de ella.
Para esta politi-cocinera, la auténtica Feria está en la zona en torno al templo de San Marcos en donde tuvo su origen; es ahí en donde Usted puede pasear disfrutando el encanto del Jardín de San Marcos -ya sin las luces tipo antro que le fueron infortunadamente colocadas en la administración municipal próximo pasada- y de una Feria provincial y sencilla.
En torno al jardín de San Marcos encontrará el tradicional juego de Lotería Mexicana, en donde podrá pasar largas tardes colocando granos de maíz en las figuras que se van cantando; “el catriiiín, el nopaaal, el tambooor, la damaa” y si tiene algo de suerte podrá ganar un bonito premio como un muñeco de peluche, por ejemplo, o un adorno de porcelana, o un reloj de pared ¡En fin! Algún objeto simple, cuya finalidad no es despertar la codicia, sino preservar el gusto por nuestros juegos de antaño.
En el área del templo-jardín de San Marcos, encontrará los puestos de comida tradicional con cena mexicana como tacos dorados, enchiladas, pozole o sopes; habrá chascas (esquites), fruta fresca, tacos variados, aguas frescas, tortas y duros de harina preparados, entre otros antojitos. Encontrará la zona de juegos para niños pequeños y podrá disfrutar el espectáculo de Los Voladores de Papantla.
Si Usted gusta del futbol podrá acudir a demostrar sus habilidades en la gran zona de futbolitos instalada a un costado del Templo, o bien, si es Usted un gran romántico, podrá probar suerte en los juegos de destreza como los de encestar pelotas o derribar figuras de plomo, a cambio de obtener un regalo para su novia o esposa.
Ricas y variadas nieves podrá disfrutar en ese rincón de la Feria con su familia, ya sea de garrafa, del Popo, o raspados (hielo picado) de limón, de vainilla, de fresa o leche; o bien podrá adquirir, por unos cuantos pesos, una bolsita de papel marrón, repleta de pepitas de calabaza recién tostadas y bien saladitas.
Extensiones de nuestra tradicional Feria serían la Casa de la Cultura Víctor Sandoval, algo (no mucho) de la calle Venustiano Carranza, el tradicional Ferial de Aguascalientes -en un lugar muy, muy lejano de la Feria- y la Exposición Ganadera. Porque de ahí en más ¡Oiga Usted! queda poco de lo que fue nuestra fiesta. ¿Qué le puedo decir? La modernidad nos alcanzó y nos arrasó, de tal manera que los restaurantes, antros, zonas comerciales y demás son como los que encontrará en cualquier lugar y en todo tiempo ¡Vaya! Con decirle que en esta edición el otrora teatro del pueblo ya se llama algo así como el canal de las estrellas ¡Hágame Usted el favor!
Lo que no se acaba. A pesar de lo que digan las autoridades en esta feria no se acaban los desafiantes y abiertos abusos de los taxistas, no se acaba el lacerante trabajo infantil, no se acaba el consumo de alcohol en jóvenes cada vez más jóvenes ¡Vaya! niños y niñas consumiendo ante la mirada indolente de la vigilancia oficial (particularmente en torno al perímetro ferial).
Los robos a transeúntes, por momentos parecen estar fuera de control, porque sí, llegan los grupos de oficiales al lugar en que ocurrieron, pero para entonces ya no pueden hacer mucho puesto que los ladrones no se quedan -desde luego- a esperarlos.
Los “tocamientos” lascivos están en esta edición disparados en frecuencia como nunca antes (esta cocinera vivió mucho tiempo en el Distrito Federal y le juro que ni en el Metro presencié algo así) y a los jefes de familia no les queda sino aguantar porque recriminar al “tocón” es arriesgarse y arriesgar al resto de la familia y pues ¡A aguantarse el coraje! Y eso que le estoy hablando del horario fa-mi-liar. Me pregunto, ¿cómo será a altas horas de la noche?
La feria de ferias. A pesar de todo, la nuestra, es la gran fiesta. La tradicional y única Feria de San Marcos. ¡La Feria de Ferias! Para esta cocinera, vecina del Barrio de San Marcos, siempre será un placer ver pasar a las familias cuando caminan emocionadas con rumbo a la Feria. Siempre es hermoso ver las parejas de jóvenes enamorados que llegan a pasear. Siempre es alentador observar a los grupos de jóvenes que llegan y se retiran con su alegría natural, lejana de la embriaguez. Por todo ello y mucho más, vale la pena quedarse en Agüitas en abril y vale la pena formar parte, orgullosamente, de la Feria Nacional de San Marcos 2014.
Nos vemos la próxima. Recuerde que en mi cocina se come, se lee, se estudia y se conversa de todo… particularmente de política.




