¿Por qué 1973? Bueno, es un año de muy buena música, principalmente en lo que se refiere al rock progresivo. Sí, me imagino que muchos (en esas me viera que de verdad fueran muchos los que leen estas líneas) estarán sonriendo discretamente dibujando un gesto irónico en sus rostros, como diciendo: “¿y a éste qué le pasa? 1967, ’68 o ’69 fueron años más productivos, salieron mejores y más discos de rock”. Sin duda, de verdad estoy de acuerdo contigo, pero la casualidad, o más propiamente dicho, la casual plática en una reunión de amigos alrededor de una mesa con un par de botellas de vino tinto a la mitad y con el inevitable factor común de la música, más específicamente de rock progresivo, empezamos a comentar algunos de nuestros discos favoritos. Nos dimos cuentas que todos, o la mayoría de ellos, habían sido grabados en 1973. Así que como consecuencia de aquella reunión, sin duda productiva, se me ocurrió compartir contigo, amable y paciente lector, algunos de los grupos de rock progresivo que sorprendieron al mundo de la música con inmensas producciones discográficas en 1973. Al terminar nuestro recorrido, que sin la menor duda quedará incompleto y evidentemente inconcluso, me dirás si estás de acuerdo conmigo o no, y si el año 1973 merece de verdad atención especial. Pues aquí vamos…
Yo tenía 10 años de edad en 1973, cuando algunos de estos monstruos del rock progresivo estaban revolucionando el mundo de la música, yo me emocionaba con el programa de “Batman & Robin” que veía todas las tardes por televisión, le pedía juguetes a Santa y mi fonoteca estaba formada con muchos de los discos de casi todas las películas de Disney, es decir, no tenía ni la más remota idea de qué era eso del rock progresivo. Todo esto lo menciono para que nos ubiquemos en el contexto histórico al que me quiero referir.
Ese año el grupo veneciano de Le Orme editó una de las grandes producciones, uno de esos discos que se convierten en obra de arte y que es una referencia obligada para todo el que guste de este lenguaje, a veces tan incomprendido dentro del rock, claro, me refiero al progresivo. El disco en cuestión es “Felona e Sorona” cuya influencia en agrupaciones posteriores es evidente, tanto así que no hace mucho el grupo, también italiano, La Masachera di Cera, le dio continuidad a la historia narrada en el “Felona e Sorona” en una producción llamada “Le Porte del Domani”. Sin duda el disco de Le Orme es una de las piezas claves para considerar el año de 1973, como un momento trascendente dentro de la historia del rock. Yo no sé si Tony Pagliuca en los teclados, Aldo Tagliapietra en el bajo, guitarra y voz y Michi dei Rossi en la batería tenían idea del tamaño de obra que acababan de crear, posiblemente mi favorita de ese año.
También de Italia tenemos el caso de dos grupos, de esos que sacan sólo uno o dos discos y es suficiente para inmortalizarse en la historia de la música popular del siglo XX, uno se llama Il Roveschio della Medaglia con su álbum “Contaminazzione”, pero todavía más grande, una obra monumental y demoledora es el “Zarathustra” de Museo Rosenbach, es una versión libre del ensayo filosófico del gran pensador alemán Friedrich Wilhelm Nietzsche.
Sin duda, uno de los discos más adelantados a su época, con un sonido de verdad revolucionario, atrevido e incluso experimental, es el álbum “Ys” del grupo Il Baletto di Bronzo o el Ballet de Bronce, bajo el liderazgo de Giani Leone. Este fue un disco que rompió todos los estándares que hasta ese momento considerábamos como propios de una banda de rock, ya sea progresivo o de lo que fuera. De hecho la estructura del disco se acerca más a los cánones de lo que es la música de concierto que al rock. Creo que éste ha sido uno de los momentos en que el rock y la música académica más se han acercado, se han tocado cariñosamente.
Dejando Italia y viajando hasta Inglaterra con encontramos con discos imprescindibles dentro de este género editados, todos en el año de 1973. Permíteme iniciar con el disco “Selling England by the Pound” de Genesis, claro, me refiero al mejor Genesis, con Peter Gabriel en las voces, Steve Hackett en las guitarras, Phil Collins en la batería, Mike Rutherford en el bajo y Tony Banks en los teclados, exquisito este disco en donde incluso encontramos ciertos toques de nacionalismo británico. En ese mismo año el trío de rock progresivo Emerson, Lake & Palmer graban su producción: “Brian Salad Surgery”, seguramente no es su mejor disco, pero inegbale el hecho de que es una auténtica joyita. El grupo Camel saca en ese año su primera producción llamada simplemente “Camel”, con este disco inician una carrera sorprendente ubicándose como uno de los máximos representantes del sonido “Canterbury”, propio de estas latitudes del Reino Unido y movimiento al que también pertenece el grupo de Caravan, del que también debemos mencionar el disco: “For Girls who Grow Plump in the Night”.
Una de las más grandes luminarias del rock progresivo inglés, ¿la mejor? Tal vez, es King Crimson, imposible no mencionar en este breve y, consecuentemente, incompleto recuento de los mejores disco de 1973, su producción “Larks’ Tongues in Aspic”, su quinto disco, para este momento, ya eran indispensables en el horizonte del rock progresivo británico.
¿Y sabes qué? Mejor ahí le dejo porque el contador de palabras ya me está presionando, en otra ocasión le seguimos. Te espero, Dios mediante, en el próximo banquete.
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