- Héctor Quiroz y Jesús Medina enunciaron los temas pendientes que tiene el Gobierno Federal para con el país
- Los dirigentes estatales del PT hablaron de las deplorables condiciones laborales y de crecimiento por las que transita México
A escasos tres días de la presentación del Segundo Informe del Gobierno de la República, presentado por el titular del Ejecutivo, Enrique Peña Nieto, han sido vertidas un importante número de críticas sobre su gestión, basadas principalmente en la falta de resultados inmediatos y en el excesivo uso propagandístico que ha destinado a su imagen personal.
Al respecto, la dirigencia estatal del Partido del Trabajo (PT), encabezada por Héctor Quiroz García y Jesús Medina Olivares, enunció las principales deficiencias que han caracterizado al primer tercio del gobierno del priista.
Jesús Medina calificó al Informe como un despliegue propagandístico que exalta la imagen de Peña Nieto, violando, dijo, el artículo 134 constitucional, que prohíbe la promoción personalizada de las acciones de gobierno. Indicó además que fue visto como un momento apoteósico, donde “el día del presidente se convierte en los días del rey sexenal”, y estableció que dista mucho de ser un informe que rinda cuentas de las acciones que ha llevado el gobierno en turno.
Criticó además que fuera “un diálogo de sordos”, donde por un lado, los legisladores criticaron algunos puntos del mismo, y por otro, el titular del Ejecutivo presentó este informe de manera disfuncional en Palacio Nacional, ante personalidades que respaldan su discurso triunfalista de las Reformas estructurales.
Hizo mención de algunas encuestas de opinión, donde seis de cada diez mexicanos reprueba la gestión de Peña Nieto, siendo la más alta desaprobación de los últimos tres presidentes.
Habló también de un “insostenible desarrollo del país, donde la lógica del discurso representa una dinámica de esperanzas a largo plazo, en lugar de plantear los resultados que se han logrado en el tiempo de gestión”, y agregó “pareció más un discurso de toma de protesta, para saber lo que hará en los próximos años”.
Recordó el nulo crecimiento económico que se ha manifestado en el país, y a ello sumó la carente política de generación de empleos, donde el Gobierno Federal no ha cumplido con su meta anual, establecida en más de un millón, sin dejar de lado cuestiones como que el salario mínimo sólo ha aumentado cinco pesos en lo que va de la gestión, ubicando a México, junto con Haití, con los peores salarios dentro de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). La canasta básica fue otro punto de distensión, dado que su precio, aseveró, ha aumentado considerablemente.
Entre otras cosas, destacó que la deuda con la que cuenta el país es histórica, ya que supera los siete billones de dólares.
Asimismo retomó cuestiones como la inseguridad, el rezago social y el combate a la corrupción, temas que no fueron tocados y que presentan serias deficiencias en la actualidad, razón por la cual advirtió que los legisladores debieran estar obligados a citar a comparecer a los secretarios del gabinete federal.
Por su parte, Héctor Quiroz comentó que la realidad da cuenta de un país que no avanza. Valiéndose del último estudio de la OCDE, subrayó que México es el único país que se encuentra por debajo del umbral de pobreza en América Latina, así como el tercero en términos de desigualdad en la distribución de la riqueza; la pérdida del 71 por ciento de la capacidad del salario mínimo, encontrándose estancado desde 1992; además de la exclusión a la que se encuentran sometidas mujeres y jóvenes en el campo laboral; la fuerza que ha tomado la informalidad sobre los negocios establecidos y la instalación de empresas que exigen garantías pero otorgan salarios y prestaciones deplorables a sus empleados, así como la falta de un seguro de desempleo que prometió el Gobierno Federal desde el inicio de su gestión.




