- La Profeco recuperó un millón 22 mil 48 pesos de 447 compradores
- 77 de 91 tiendas verificadas serán multadas tan pronto se califique la infracción
La Procuraduría Federal de Protección al Consumidor recibió en sus 52 delegaciones en el país 597 quejas y denuncias durante los cuatro días del Buen Fin; resolvió 447 de ellas a favor de compradores; recuperó un millón 22 mil 48 pesos y descubrió precios engañosos en 77 de 91 tiendas verificadas.
Así informó ayer la procuradora Lorena Martínez Rodríguez, al señalar que en breve se dará a conocer las sanciones económicas que se impondrán a aquellas 77 negociaciones que fueron sorprendidas, tratando de engañar a los consumidores: alteraron los precios y luego los ofertaron en el Buen Fin, precisó.
Comentó que la conciliación que se llevó a cabo de manera inmediata arrojó que el 75% de esas quejas o denuncias fueron satisfechas conforme a los requerimientos del consumidor, por lo cual 449 de las 597 quejas o denuncias fueron atendidas a favor de los consumidores.
“El monto recuperado a favor de los consumidores ascendió a un millón 22 mil 48 pesos”, subrayó Lorena Martínez.
Destacó también que Profeco hizo con toda anticipación, durante los dos meses previos a la temporada comercial, un levantamiento de precios y publicó los enlistados en un micrositio de la página de Internet de la Procuraduría dedicado al Buen Fin, que incluyó el Quién es Quién en los Precios, “un instrumento muy útil porque también permitió identificar, lamentablemente en muchos casos, alguna prácticamente no favorable ni transparente a los consumidores, como lo fue elevar el precio de algún producto para luego ponerlo en oferta”. La página tuvo una afluencia de más de 350 mil visitas, de las cuales 98 mil visitaron específicamente al micrositio del Buen Fin y más de 50 mil personas, la lista de Quién es Quién en los Precios.
Explicó que esa práctica, “que evidentemente es desleal, que engaña o pretende engañar a los consumidores, trajo como consecuencia la imposición de sanciones por parte de la Profeco a más de 50 establecimientos, a lo largo y ancho del país, que fueron suspendidos sus actividades comerciales de esos productos, que se identificaron como manipulados para pretender engañar al consumidor”.
Indicó que el procedimiento que establece la ley dice que la Profeco está facultada para suspender la comercialización del bien o producto que está sujeto, en este caso, a una denuncia, “lo que se suspendió fue la comercialización del producto que fue motivo de la falta o infracción, no se suspendió ni cerró totalmente la tienda, sino la venta de esos productos y trae como consecuencia la aplicación de sellos de suspensión. Y por supuesto, la imposición de una sanción económica, que se habrá de concretar una vez que se califique la infracción”.




