- El PRI cuenta con tres días a partir de la notificación del Trife para interponer un recurso de apelación
- No hay un reglamento del INE que regule la celebración de elecciones extraordinarias porque sería la primera vez
Desde la creación del Instituto Nacional Electoral (INE), y por lo menos en los últimos nueve años, no existe registro de nulidad en elecciones federales. La de Aguascalientes marca un precedente para la historia electoral y permitirá la creación de nuevos reglamentos.
Tras la resolución de la Sala Regional número dos, con sede en Monterrey, del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (Trife), de anular las elecciones del Distrito federal I por la intromisión del gobernador del estado en el proceso electoral, cuyo resultado fue la invalidación del triunfo del candidato del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Gregorio Zamarripa Delgado; es probable que se convoque a la realización de elecciones extraordinarias en dicho distrito para reanudar el proceso y obtener un nuevo ganador de la contienda.
Según lo explicado por el presidente del Consejo Local del INE, Ignacio Ruelas Olvera, el PRI cuenta con tres días a partir de la notificación del Trife para interponer un recurso de apelación ante la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, misma que deberá emitir el fallo resolutivo el próximo 19 de agosto.
“Aún cuando lo determine la Sala, el PRI, que es el que se duele de esta resolución porque le quita la constancia de mayoría y validez, tiene derecho a la segunda instancia y deberá, si es un verdadero partido político, deberá recurrir para clamar justicia electoral y hacer los argumentos que a su interés convengan. En Aguascalientes es inédito de la nulidad de una elección”.
Según lo señalado por Fabiola Navarro, especialista en investigaciones jurídicas electorales, aunque está previsto en la ley cuál es el tratamiento que tienen que tener las elecciones extraordinarias, es una medida drástica que penaliza a más de un organismo de la sociedad.
“Sí está previsto que una elección se puede anular, y qué bueno que sea anule y que exista el supuesto, y qué bueno que lo hagan, seguramente más de una elección cumpliría con características para ser anulada, pero esto no solamente penaliza al que ganó, penaliza al electorado que fue, que sufragó, que escogió; y penaliza al resto de los competidores que participaron y que hicieron su mejor esfuerzo y que obtuvieron una votación. Desde el punto de vista del estado también hay una penalización, porque hay una nueva erogación de recursos para poder llevar a cabo la elección, operativamente al INE le implica montar otra vez la elección, hay una implicación fuerte e importante”.
La especialista agregó que debido a que es la primera vez que anula una elección federal es probable que para el 1 de septiembre -fecha en la que los candidatos electos a diputado federal toman protesta- no se tenga aún un resultado de las elecciones extraordinarias.
“No hay un reglamento del INE que regule la celebración de elecciones extraordinarias porque sería la primera vez en muchos años, tendrían que reglamentarse las condiciones mediante la convocatoria que se emita. La ley dice que la convocatoria para una elección extraordinaria se debe emitir dentro de los 45 días siguientes a la conclusión de la última etapa del proceso, que es la de la Sala Superior, el próximo 19 de agosto. A partir de ahí, el Congreso y el INE tienen un mes y medio para convocar a la nueva elección, desde el punto de vista de la ley, no pasa nada si el Congreso de la Unión se instala con menos de 495 diputados. No podría ser el 1 de septiembre, no daría tiempo, se recorrería, los plazos que seguirían serían totalmente extraordinarios”.
Sin embargo, Ruelas Olvera puntualizó que el INE está preparado para convocar a una segunda ronda electoral: “El INE está preparado para hacer una elección extraordinaria del Distrito federal I, antes tuve una reunión con el servicio profesional para empezar a hacer la agenda de una nueva elección, pero es un trabajo interno”.
De llamarse a una jornada electoral extraordinaria, los partidos políticos podrían proponer a nuevos candidatos (diferentes que en el primer evento): “Si hay partidos que pierdan su registro en este proceso electoral y existiera una nueva elección, podrán jugar candidatos de esos partidos porque se vuelve a repetir el proceso”.
Los recursos que se utilizarían serían extraordinarios, y a decir de Ruelas Olvera, no se trata de grandes cantidades monetarias: “Serían mínimos, sobre el gasto corriente de la delegación”.
“Aguascalientes tenía un índice de menor votación del 42 por ciento, hoy llegó al 37, menos el ocho del voto nulo, solamente el 29 por ciento del cuerpo electoral votó por candidatos y partidos políticos. Los ciudadanos votan cuando hay una seducción importante de la fuerza política, será un nuevo proceso electoral, nuevo día electoral, jornada electoral, campaña, sesión de cómputo y tribunales.”




