Manuel Hernández, subdirector de capacitación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, aseguró que la Reforma Constitucional en materia de Derechos Humanos está revolucionando el sistema de justicia en el país.
Expresó que los cambios a la carta magna son de tal envergadura que, la Suprema Corte de Justicia de la Nación inauguró una nueva época cuyas implicaciones tienen que ver con que, a partir de esta Reforma, la aplicación de las leyes y la justicia instaura nuevos paradigmas en donde se privilegian los derechos humanos sobre cualquier otro interés.
Al impartir el taller sobre Reformas Constitucionales en materia de Derechos Humanos a organizaciones de la sociedad civil, auspiciado por la Comisión Estatal de Derechos Humanos y la propia CNDH, dijo que estas reformas implicarán ajustes a una cantidad muy grande de leyes secundarias, códigos y reglamentos cuyos efectos finales deberán ser la impartición de justicia eficiente en beneficio de los ciudadanos.
Indicó que con esta Reforma se privilegiarán tratados y acuerdos internacionales. Hoy los tribunales deben acatar las disposiciones de tratados internacionales vinculantes aún cuando en los códigos, federal y del Fuero Común no prevean figuras jurídicas que salvaguardan derechos humanos.
Dijo que otros aspectos que conllevan los cambios constitucionales es el tema de la cultura y la educación en materia de derechos humanos, cuyas implicaciones no solamente tienen que ver con una reforma educativa, tanto en el aspecto formal como de contenidos orientados a los derechos humanos, sino de la transformación cultural y de formas de pensar de las personas en donde se tenga presente que las personas tienen derechos y nada está por encima de esos derechos.
Expuso que de acuerdo a estudios sobre violaciones a derechos humanos, dijo que es preocupante que dos terceras partes de estas violaciones se dan por desconocimiento de las personas sobre sus derechos.
“Son 75 personas que de cada 100 no saben que tienen derechos; desconocen que sus derechos deben ser respetados y que existen instancias y leyes que salvaguardan esos derechos”, y advirtió que no hay esa conciencia, ese interés del Estado mexicano por que los ciudadanos conozcan sus derechos y la forma de defenderlos.




