Tito, tito, capotito sube al cielo y se cebó... Por supuesto el tema es el cambio que desde el centro hiciera Ricardo Anaya Cortés a la convocatoria para registro de candidatos, Paulo Martínez López no pudo ocultar el azoro y hasta una lagrimita porque el Consejo Político Estatal no había agregado especificaciones acerca del género de los candidatos, de hecho, en un primer momento los panistas juraban que era un error de dedo, incluso cuando se les mostraba la convocatoria publicada en el sitio oficial de Acción Nacional. Mala, muy mala noticia para los fans de José Ángel González Serna, cuando todo estaba tan encarrilado que hasta los regidores hacían un huequito en su jornada laboral para rendirse a sus pies y el diputado Mario Álvarez Michaus detuvo la impresión de playeras con su nombre.
Baja (hidro) calidad. Como malos fueron los comentarios (ya regresamos a los panistas) con que el magistrado de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, Salvador Nava Gomar, caracterizó a los diputados de Aguascalientes cuando lo menos que les dijo fue que era deplorable la baja calidad democrática de su producción normativa, y como se preveía, algunos diputados prefirieron hacerse los ofendidos antes de aceptar cualquier crítica, como María de los Ángeles Aguilera Ramírez, quien descalificó los juicios del TEPJF que porque son subjetivos, Jorge Varona Rodríguez aplicó la de siempre: no conozco el dictamen, sólo lo que se ha publicado en los medios; mientras que sus diputados Enrique Juárez, Eduardo Rocha y Verónica Sánchez Alejandre, poco preparados preferían decir que si el Tribunal lo decía, pues había que acatarlo, qué, quién sabe, pero de inmediato se abocarían a preparar una reforma para establecer los cambios observados por la autoridad federal, a lo que Varona Rodríguez les aclaró que no es ya trabajo del Congreso sino del Instituto Estatal Electoral. El nivel del debate no levantó ni tantito del suelo, como era de esperarse los del PAN y PRD culparon a los del PRI por los excesivos requisitos para las candidaturas independientes, Sylvia Garfias Cedillo y Cuauhtémoc Escobedo Tejada sacaron los trapitos al sol de los priistas, con tanta saña que al final quedaron embarrados pues la conclusión es que los requisitos se aprobaron por unanimidad tras la negociación con el PRI.
Vestidos de novia y alborotados con Paquín se quedaron (regresamos a los panistas) Álvarez Michaus y los regidores Saúl Jiménez Colombo, Carmen Lucía Franco, Cuco Muñoz de Luna, Jesús Alberto Rodríguez, así como los síndicos Ahmed Franco y Refugio López, pues la convocatoria para registro de candidatos del PAN estableció que las fórmulas para las presidencias municipales de la capital, Cosío, El Llano, San Francisco de los Romo, San José de Gracia y Tepezalá deberán encabezarlas mujeres. Así que para Aguascalientes se le dice adiós a las pretensiones de González Serna y se amplían las posibilidades para Martha Cecilia Márquez Alvarado, Sylvia Violetta Garfias Cedillo y Teresa Jiménez Esquivel, a quienes de inmediato buscamos para que nos dijeran que le habían retirado la corona a Paquín, Márquez Alvarado aplaudió la decisión y dijo que este es el escenario que más le beneficia, a pesar de que su nombre no figuró en las encuestas aplicadas en lo interno. Garfias Cedillo aseguró que desde el planteamiento de la reforma electoral promovió la paridad de género en el Congreso, Cabildo y alcaldías con el objeto de incentivar la participación de las mujeres en el ámbito de la política. Además, empleó sus redes sociales para externar su beneplácito. Llamó la atención de que en Twitter, la panista dijo estar “preparada para participar en la contienda externa”. ¿Será? Quien mandó a decir que en boca cerrada no entran moscas fue Jiménez Esquivel, quien con un desafortunado intermediario mandó a decir que tenía indicaciones de no dar declaraciones, luego de que medios de comunicación locales aseguraran que había sido impuesta por el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) como candidata a la presidencia municipal de Aguascalientes gracias a la intercesión del ex presidente nacional del PAN Gustavo Madero. A pesar de que la idea no es descabellada, quien quiera que filtró el rumor pasó por alto que el Consejo Político Estatal determinó que el método de selección del abanderado panista a la alcaldía capitalina será mediante el voto directo de la militancia, y ahí sí, pues, este, ¿cómo decirlo?, pues así, tendrá que votar la militancia.
Lo que hace la mano hace la tras. La publicación de la convocatoria panista no sólo destanteó a los Paquinliebers, al parecer también de refilón hace que el PRI haga sus ajustes; todavía el miércoles no quedaba muy claro quién iría por el tricolor a la alcaldía capitalina y en la sala de espera estaban Enrique Rangel Jiménez, Adrián Ventura, Gustavo Granados Corzo y Alberto Viveros; sin embargo, tras las centenas que acudieron al PRI al Curso de Documentos Básicos del partido, si bien pareciera que el número de suspirantes a recuperar el municipio capital aumenta, lo cierto es que se van cerrando las posibilidades y todo queda entre tres.
Los tres caballeros. Granados Corzo se bajó de la contienda, al locutor Alberto Viveros nadie lo toma en serio, por más que presuma que tiene el apoyo de Lorena Martínez, ni porque ya renunció y el lunes es posible que ya no asista a presentar noticias, y es que se pusieron severos en el PRI y no le tomaron a bien que supiera tan poquito del tricolor; luego, el delegado Fernando Palomino Topete se subió justo a tiempo como para que lo tomaran en serio; por lo que escuchamos y vimos en los pasillos, queda entre Palomino Topete, Rangel Jiménez y Ventura Dávila, con la posibilidad de que este último renuncie porque si bien tiene un fuerte respaldo, no le alcanza más que para negociar una diputación local, que es lo que le darían también a Granados Corzo por declinar… Así las cosas, se pone peliagudo. Mañana Lorena Martínez solicitará su registro como precandidata al Gobierno del Estado, el PRI saldría muy fortalecido si se presentara de una vez la fórmula, pero… si queda Fernando Palomino tendría que ir en contra de una mujer, y básicamente nos recuerda el papel jugado por Alfredo González cuando fue arrasado por Teresa Jiménez… Auch. De pronóstico reservado, pues. El lunes regresamos con más comidilla.
La del estribo. Las orejas de coliflor son una deformidad del oído externo producto de un trauma; la lesión no sólo produce hemorragias sino que deforma la oreja, aparte de la deformidad y cicatrices puede causar sordera. Ante los cambios en la convocatoria que el PAN nacional le enmendó al estatal, uno de los fans de González Serna más empecinado en no darse cuenta de que el escenario había cambiado y apostó a un caballo malo fue Mario Álvarez Michaus, quien insistió en su muro de Facebook durante varias horas que nada era cierto, y ya después, ante lo inevitable, escribió: “Aún no escucho la campana” diría Mickey a Rocky Balboa… Bueno, pues el entrenador de Sylvester Stallone tenía orejas de coliflor, hay que ver las películas completas.
@PurisimaGrilla




