- Beneficia abstencionismo a partidos con mayor militancia
- Progrebús, el acarreo más grande en la historia electoral de Aguascalientes: Solís Hernández
Las estructuras de los partidos políticos mayoritarios podrían decidir quiénes gobernarán por los próximos tres y seis años, advirtió Alejandro Solís Hernández, vocal de Capacitación del Instituto Nacional Electoral (INE), pues en la medida en que el electorado se incline por no asistir a las urnas, mayor será el impacto del voto duro en los resultados de la elección.
En los comicios del año pasado, solamente votó el 36,4 por ciento del listado nominal de Aguascalientes -842 mil 456 electores- colocándose en el tercer lugar de las entidades con mayor abstencionismo, sólo por debajo de Baja California, con 70,4 por ciento y Chihuahua, con 67,8 por ciento, según información del INE.
De los votos contabilizados en dicha jornada aproximadamente el seis por ciento fue anulado. Aunque el voto nulo no tiene efecto en el sistema electoral, indicó el vocal, en 2015 se posicionó como la tercera fuerza electoral del estado, mandando un mensaje claro a autoridades, partidos y actores políticos “de que aquellos que fueron electos carecen de la legitimidad que pudieron haber obtenido con una mayor participación y un voto más organizado y consciente”.
El vocal detalló que en los estudios de opinión el porcentaje que se define como indeciso difícilmente saldrá a ejercer su derecho el día de la jornada; los que deben interpretarse como potenciales votantes son los que clasifican en el apartado de “no respuesta”, mismo que fue constante en casi todas las encuestas que se publicaron en este proceso electoral: cinco de cada diez.
Actualmente el padrón asciende a 986 mil electores.
Destacó que se debe entender cómo operarán las maquinarias electorales de los partidos políticos porque una baja participación favorece sólo a los partidos con mayor estructura partidaria: “Algunos le llaman mover a las bases; estructuras obreras, campesinas o juveniles (…) Depende qué tanto comprometieron a sus estructuras terrestres a llevar a votar a sus simpatizantes”.
Aunque el acarreo se encuentra prohibido por la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales (Lgipe), las autoridades se mantendrán atentas a este tipo de conductas: “Recuerden ustedes que el acarreo más famoso por la historia electoral de Aguascalientes es conocido como Progrebús”.
Aclaró que si o dos o más personas que no son familiares asisten juntas a votar ya encuadra como acarreo. Aunque es común, no son habituales las denuncias de esta práctica, pues en 2012 no se formalizaron quejas electorales y en 2015 hubo tres que no estuvieron relacionadas a coacción de voto.
La Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) coloca células en puntos estratégicos de la entidad para disuadir este comportamiento.




