Nadie va a querer cargar costo político de aumentos mensuales hasta 2013
Más de 600 mil vehículos modernizados, apenas 21 mil en la última década
De 2008 a la fecha, 35 gasolinazos que suman aumentos de casi el 100 por ciento, inflacionarios, pueden desaparecer en diciembre, pero surgiría fuerte aumento de un solo golpe, porque nadie va a querer cargar con su costo político en 2013.
Empresarios del autotransporte nacional le pedirán al presidente electo Enrique Peña Nieto que sin vulnerar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, se impida la entrada al país de vehículos chatarra; de más de 600 mil vehículos que se han modernizado (sustituido), sólo 21 mil corresponden a la última década.
Así lo afirmó Roberto Díaz Ruíz, presidente de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), al señalar que en 2008 hubo 33 incrementos, 17 en 2009, 12 en 2011 y mismo número en lo que va de 2012, pero que al parecer llegarán a su fin.
En conferencia de prensa, dijo el dirigente empresarial que ya no son novedad los gasolinazos, “estaban programados para todo 2013, las autoridad ha dicho que seguirán, aunque por la situación política que se vive hay dos escenarios: continuar con los aumentos mensuales a las gasolinas, y la otra que, por política, pudiera darse un incremento importante antes de la toma de protesta de Enrique Peña Nieto”.
Se estimó que pudiera darse por cuestiones políticas; nadie quiere cargar con ese costo. El aumento es inevitable, dado que los precios siguen incrementándose a nivel internacional y que México importa el 40 por ciento de lo que consume, y si en EU el precio es diferente, pudiera darse esa posibilidad, aunque en el vecino país incluye uso de autopistas y aquí es por aparte.
“Necesitamos transporte competitivo y encareciendo el insumo básico que es el combustible cada mes, difícilmente se puede llegar a la competitividad que el país necesita”.
Indicó que el Diésel allá tiene el 10 por ciento de azufre del que se usa en México, todavía es el mismo de tantos años y las máquinas modernas sufren por ese combustible; “tiene que llegar más tarde que temprano ese combustible que contamine menos y cause menos problemas al mantenimiento de motores. Se resolverá el día en que México tenga las suficientes refinerías para refinar todo el producto que consumimos, pero estamos lejos de eso. Esperamos que opere Tula en la próxima administración”.
Díaz Ruiz subrayó que existe la posibilidad de que los incrementos a la gasolina se delante de un solo golpe, políticamente se puede dar porque en 94-05 nadie quiso cargar con el “error de diciembre”, dijo, y sin embargo, calificó de positivo ese incremento:
“Ya sabemos que son nueve centavos, pero sicológicamente desgastan más. Todo incremento es inflacionario, la gran mayoría de las empresas lo ha absorbido, ajuste a los fletes… Me tocó vivir incrementos de hasta el 35 por ciento. De 2008 a la fecha el aumento ya anda cerca del 100 por ciento y sí es inflacionario aunque se diga lo contrario”.
Por otro lado, comentó Díaz Ruiz que elabora un libro con las propuestas del sector nacional del autotransporte de carga, que será entregado en octubre próximo al presidente electo Peña Nieto, y que contempla los transportes marítimos, ferroviarios, carreteros y de paquetería y mensajería.
En ese documento propondrá la Canacar que, sin vulnerar el Tratado de Libre Comercio con los países del norte, se ponga un candado a la entrada de vehículos chatarra.
También abordó el tema de la modernización, indicó que “con un programa de chatarrización más efectivo, en los últimos 10 años se han chatarrizado 21 mil vehículos de 600 mil camiones, a ese paso en 100 años nos modernizaremos. Se debe de hacer esfuerzo con un buen programa”.
Âgregó que el precio que toman para chatarrizar es de 180 mil pesos, por lo que pidió que se actualice “entre 250 y 300 mil por cada vez a chatarrizar y otro que se reciban dos unidades viejas a cuenta de una nueva. Hay muchos vehículos con más de 20 años circulando por las carreteras del país”.
Explicó que las medianas y las grandes empresas más o menos se defienden solas, “lo crítico es que para el hombre-camión, que es el que tiene de una a cinco unidades. Un tracto camión cuenta entre un millón 600 y un millón 900 mil pesos. Y una caja seca económica, cerca de medio millón; si modernizará sus cinco camiones tendría que invertir por lo menos uno 10 millones de pesos”.
Al volver a los gasolinazos, Díaz Ruíz admitió como preferible un solo incremento, “pero que permita planificar todo el año siguiente, y no los gasolinazos de desgaste sicológico; esos nueve centavos se convierten en mucho, traemos tanques de gasolina de hasta mil 250 litros, que un camión consume en día y medio o dos días”.
La Canacar espera que las autoridades tomen la decisión que más convenga: en 2008 estaba el Diésel en 5.93. Fueron 33 incrementos nada más en ese año, y en un solo mes hasta cuatro; era un verdadero descontrol. Les afectó a los transportistas, aunque a la sociedad no. En 2009 se tuvieron 17 incrementos y en 2010 sólo 13, con IVA del 15 al 16 por ciento; el año pasado sólo 12. Pero sí va a rebasar la barrera sicológica de 11 pesos, está a 10.90 litro, concluyó Roberto Díaz Ruíz.
