- Presentó decálogo de propuestas para la renovación del partido
- Deben ser expulsados del partido traidores y corruptos
Al destacar el éxito logrado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) en la elección local de 2010, cuando éste encabezó el Comité Directivo Estatal tricolor, Isidoro Armendáriz García no descartó buscar retomar las riendas de este instituto tras la próxima salida de Norma Esparza Herrera, “soy un cuadro habilitable del partido para cualquier comisión u órgano de gobierno; en cualquier circunstancia, en cualquier coyuntura me he preparado justamente para los liderazgos colectivos, que es lo que necesita el partido, y para contribuir a que el partido, a nivel nacional, se democratice y se consolide y esté puesto para enfrentar la sucesión presidencial de 2018”.
Ante ello, y al considerar que el cargo en cuestión ya fue ocupado por el delegado de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), se consultará los estatutos del Revolucionario Institucional a fin de descartar cualquier impedimento para aspirar a retomar la dirección del partido, “es un tema que tenemos que revisar, la verdad no le he entrado yo a la revisión de la parte estatutaria para la posibilidad de que un dirigente del partido, que ya lo fue, lo vuelva a ser, pero por supuesto que soy un cuadro habilitable”, dijo el también consejero político del PRI.
Tras los insuficientes resultados electorales que el priismo aguascalentense logró el 5 de junio, Armendáriz García aseguró que este instituto requiere una renovación urgente, misma que debe ir más allá de modificaciones superficiales: “las nuevas dirigencias del partido (…) deberán contar con liderazgos estratégicos, humanos, dinámicos, visionarios, misioneros y conciliadores. También requiere sangre purificada en sus venas para la reconstrucción de su tejido político (…) por ningún motivo podemos seguir perdiendo elecciones por divisiones caseras, torpeza política, traiciones, improvisaciones, simulaciones, impericia o ingenuidad”.
Además, llamó a la militancia priista a sumarse en contra de la corrupción generada por militantes que integran el servicio público, “denunciar los actos de corrupción, crear un órgano de control y seguimiento que promueva la expulsión de los traidores al partido. Erradicar liderazgos autoritarios, monolíticos y lineales que producen derrotas electorales, y revisar los métodos de selección de candidatos”.
Ante la situación del partido, Isidoro Armendáriz García dio a conocer un decálogo de propuestas dirigido a sus compañeros priistas, en el cual se pide la reorganización del partido, renovación de comités municipales por la vía de la consulta, renovación integral del Comité Directivo Estatal, llamar a cuentas a servidores públicos emanados del tricolor involucrados en actos de corrupción, crear un órgano que promueva la expulsión de militantes traidores, erradicar liderazgos autoritarios, construir un frente de evaluación, no improvisar candidaturas ciudadanas, crear una comisión integradora y generar foros para discutir las principales problemáticas del estado”. Aseveró el priista, quien finalmente destacó que “todo cambio trae consigo dudas y riesgos, pero no debemos titubear en realizarlos por muy duros que parezcan, pues el PRI debe perdurar en la vitalidad de la verdad y no dejar que muera por la complicidad del silencio y de la conveniencia”.




