- Por malas prácticas y no cumplir con el perfil que se requiere, según lo dicho por René Urrutia
- Advirtió que el desempeño de toda la planilla es vigilado de cerca
En tres meses cerca de 20 trabajadores de la Fiscalía General del Estado (FGE), en su mayoría pertenecientes a la Policía Ministerial, fueron separados de su cargo por malas prácticas y no cumplir con el perfil que se requiere: “Tenemos un trabajo permanente de evaluación de resultados y quien no cumple con esto, será dado de baja (…). Yo estoy sujeto a resultados, y todos están sujetos a resultados, agentes del ministerio público, policías ministeriales, peritos, personal de apoyo, todos”, advirtió el fiscal, René Urrutia de la Vega.
En entrevista grupal, refirió que al asumir las riendas de la FGE -en marzo de 2017- informó a su personal “que tenemos que brindar un servicio cálido, profesional y de calidad a la ciudadanía porque nos debemos a ella”, y les advirtió que quien no sea consciente de ello, será reemplazado por personas capaces de ofrecer un mejor servicio. Señaló que algunos de los elementos decidieron voluntariamente separarse de sus funciones.
Urrutia de la Vega no quiso precisar si hay más empleados en proceso de investigación, con el argumento de que el desempeño de toda la planilla es vigilado de cerca. Por este motivo, exhortó a los ciudadanos a denunciar cualquier comportamiento cuestionable a manos de estos trabajadores.
“Ha estado pasando, se han estado separando algunas personas, hemos estado dando cuenta de ello, hemos tenido algunas modificaciones en ese sentido y seguirá pasando (…). Afortunadamente la mayoría de nuestros compañeros lo están entendiendo y poco a poco estamos modificando nuestras conductas para brindar el mejor servicio con resultados”, apuntó.
Actualmente se lleva a cabo un proceso de estructuración y reestructuración del Ministerio Público, relacionado con la profesionalización y reforzamiento de las labores de investigación especializada en secuestros, homicidios, robos de vehículos, robos a casa habitación y comercio, delitos de narcomenudeo y atención integral a las mujeres, agregó el titular de la FGE.
También se realizaron cambios para agilizar la atención a denuncias, con lo que dijo, se ha logrado acortar “muy sensiblemente” los tiempos de espera de las personas que acuden a dar cuenta de delitos. Urrutia aseguró que de un promedio de dos horas y media que demoraba, actualmente el trámite oscila de siete a diez minutos, dependiendo de la afluencia de personas, “y esperamos bajar mucho más”.
Urrutia de la Vega señaló que con estas acciones se pretende aumentar la confianza entre la población y con ello, la cultura de la denuncia entre las víctima del delito.




