- El Observatorio Nacional de Violencia exentó a aquellos estados que conforman un corredor de trata de mujeres
- Es un avance que las mujeres en Aguascalientes reconozcan cuando son víctimas de violencia, es el primer gran paso para pedir ayuda
El cuarto lugar de Aguascalientes en prevalencia de violencia hacia la mujer ha sido un tema de discusión y bastante delicado, pero es necesario conocer cómo se generó esta estadística del Observatorio Nacional de Violencia, señaló la directora del Instituto Aguascalentense de la Mujer (IAM), Lourdes Murguía Ferreira.
Al manifestar que no está de acuerdo en ese lugar en el que colocan a esa entidad, compartió algunas de sus reflexiones a fin de destacar que existen otros estados de la República Mexicana en donde la problemática de violencia es distinta y mucho más grave que en Aguascalientes.
“Yo no quiero que se malinterprete lo que les voy a decir: el que nos hayan ubicado al estado en un cuarto lugar es sumamente delicado, pero debemos entender cómo se genera esta estadística. Estamos viendo que están en esos cuatro primeros lugares el Estado de México, la Ciudad de México, Jalisco y Aguascalientes. Yo me pregunto dónde está Chihuahua, Guerrero, Michoacán, Veracruz, Tlaxcala e Hidalgo, entidades que integran un corredor de trata de mujeres en su mayoría”, manifestó la funcionaria.
Consideró que el exentar en la estadística a los mencionados estados en donde las mujeres sufren de varios riesgos a su integridad, como también lo es el feminicidio, es invisibilidad una problemática de gran magnitud.
Externó que respecto a este preocupante cuarto lugar de Aguascalientes en cuanto a violencia, se sentó a platicar con las organización de la sociedad civil que trabajan el tema, quienes manifestaron que el estado ha hecho su trabajo, primero al reconocer que existe violencia, segundo, que las mujeres la reconozcan; tercero, que se reconozcan como personas violentadas; y cuarta, que contestan así al interrogatorio de una estadística.
“Cuando se dieron las primeras encuestas, tocaban a los hogares y preguntaban si sabía la mujer qué es violencia, la respuesta era que no sufría de violencia, por ello no aparecíamos en el mapa. Ahora las mujeres se reconocen como violentadas. Esta puede ser una respuesta, sin embargo no la vamos a dejar a un lado por este análisis, al contrario, hay que fortalecer toda la política pública que vaya dirigir a prevenir y atender la violencia”, explicó Murguía Ferreira.
Externó que el reconocerse como una persona violentada representa un primer paso, muy importante, para entonces buscar ayuda, y para eso están las organizaciones civiles y las instituciones, para acompañar y atender esa primera decisión de salir de ese círculo de violencia.
Lourdes Murguía reconoció no es suficiente el apoyo, pues aún existen muchas mujeres que requieren de esta atención en Aguascalientes, además de la prevención y tratamiento de otras violencias.
Explicó que en este tema de las violencias también es necesario reconocer y atender aquella que ejercen las mujeres sobre los hijos, la violencia en las escuelas, la violencia entre niños y niñas, la violencia institucional, política, la patrimonial, la violencia económica en donde las pensiones son prácticamente escondidas a las mujeres, y donde el patrimonio lo forja el proveedor más fuerte económicamente, y que en México generalmente es el hombre.
