- Entre ellos se encuentran 63 menores de edad; la ley dice que no deben ser separados de sus padres durante el procedimiento
- Más del 80 por ciento de los extranjeros fue encontrado en el municipio de Jesús María
Entre enero y mayo de 2018, 191 extranjeros -entre ellos 63 menores de edad- fueron puestos a disposición de la delegación del Instituto Nacional de Migración (INM) en Aguascalientes por no contar con documentos para acreditar su estancia.
La mayor parte de estas personas (182) era originaria de Centroamérica: 108 de Guatemala, 73 de Honduras y uno de El Salvador; se cuentan además nueve sudamericanos: cinco de Colombia, tres de Brasil y uno de Argentina, según cifras de la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación (Segob) federal.
El informe especifica que 154 de estos forasteros fueron hallados en Jesús María, lo equivalente a un 80 por ciento; 32 se encontraron en Aguascalientes capital, tres en el municipio de El Llano y dos en San Francisco de los Romo.
En el periodo antes mencionado, un total de 175 extranjeros fueron devueltos a sus tierras natales. De estos, 108 -90 hombres y 18 mujeres- volvieron a través de un procedimiento de retorno asistido, que se concede siempre y cuando no exista ningún impedimento legal para que abandonen el país; el resto de ellos, 67, regresaron a través de la deportación. La Ley de Migración contempla ambos mecanismos para expulsar del territorio mexicano a los extranjeros en situación irregular.
A partir de su presentación a las autoridades migratorias, se cuenta con un periodo de quince días para resolver su estatus y obligarlos a regresar por cualquiera de los dos procedimientos que la ley marca.
Entre las personas foráneas detenidas por el INM se encuentran 63 menores de edad, 17 de ellos no se encontraban acompañados de sus padres o de algún adulto en el momento del hallazgo -todos de 12 a 17 años-; otros 28, de cero a 11 años, si estaban en presencia de un adulto.
Todos estos niños y adolescentes eran centroamericanos: 42 de Guatemala, 20 de Honduras y uno de El Salvador.
Las personas con estancia irregular son alojados por un plazo máximo de 90 días en estaciones migratorias y durante su estancia, el INM debe respetar sus derechos humanos como recibir protección de su representación consular, avisar a sus familiares o persona de su confianza, contar con traductores o intérpretes, recibir información acerca de la posibilidad de permanecer en el país de manera regular, entre otros.
La legislación establece, en su artículo 107, que los hombres y mujeres deben ser separados, manteniendo a los menores de edad preferentemente junto con su madre, padre o acompañante, excepto en los casos en que así convenga al interés superior del niño, niña o adolescente, con el fin de promover el derecho a la preservación de la unidad familiar.
