La Universidad Autónoma de Aguascalientes y sus profesores están listos para el uso de las nuevas tecnología de información y comunicación para fines educativos, hay algunos que las consideran indispensables y por el contrario hay otros que consideran que son inútiles.
Estas y otras aseveraciones en torno al uso de las nuevas tecnologías en la Universidad son el resultado de una investigación que realizó Irma Carrillo Flores con 474 académicos de los diferentes centros académicos y los del bachillerato.
Como parte de las mesas de trabajo del Décimo Seminario de Investigación de la UAA, en el área de ciencias sociales, económicas y humanistas durante la sesión de trabajo de ayer se presentaron 14 investigaciones de académicos tanto de la casa anfitriona como de otras universidades, como la Universidad Pedagógica de Aguascalientes (UPN), la Universidad del Valle de México (UVM) y la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN). Entre ellas estaba la denominada Nuevas Tecnologías de la Información y Comunicación: un estudio con profesores de la UAA.
Como parte del estudio obtuvieron en primera instancia sobre el uso y acceso de las tecnologías clásicas como el gis, papel, proyector de acetatos y aulas audiovisuales los maestros tienen muy claro que todas estas herramientas están disponibles para cuando ellos las necesitan como un complemento al impartir sus clases, en el caso de las nuevas tecnologías, la web, el uso del correo electrónico y otros implementos, la percepción de los profesores es que también son de fácil acceso y aunque sí son utilizadas por la mayoría de los docentes, todavía hay otros más que no las consideran parte de su proceso de enseñanza.
Según el estudio siete de cada diez profesores consideran a las nuevas tecnologías como favorables lo que da una pauta de la diposición que ellos tienen para usar el internet, la web y el correo electrónico.
Del total de los profesores, 325 manifestaron no hacer uso de las nuevas tecnologías porque argumentaron que la naturaleza de su curso no estaba ligado con el uso de las nuevas tecnologías, otros dijeron que no las usaban porque siempre estaban ocupadas y finalmente porque no las saben utilizar, debido al diseño del mecanismo con el que recabaron la información no les fue posible determinar cuáles asignaturas son en las que los maestros consideran innecesario el uso de estas tecnologías.
Hubo un dato que Irma Castillo consideró como sobresaliente y fue que el 44 por ciento de los profesores no tienen idea de que en la Universidad cuentan con cámaras digitales a disposición de los maestros y estudiantes por si llegaran a necesitarla en alguna actividad de la materia.
La investigadora sostuvo que no basta con saber qué alcances tienen los maestros en lo que se refiere a las nuevas tecnologías sino que también es necesario determinar el nivel de los estudiantes pues en el proceso enseñanza-aprendizaje del aula el proceso se da entre ambas partes y es por eso que actualmente trabajan en una investigación con profesores y estudiantes de la carrera de Asesoría Psicopedágogica.
La conclusión de la investigación de acuerdo al conteo de los datos recabados coincidió con el planteamiento de la hipótesis pues fue que la Universidad y los profesores están listos para enfrentar los retos de las nuevas tecnologías aunque hace falta que los académicos desarrollen habilidades para ser usuarios inteligentes de las nuevas tecnologías, es decir, que tengan un manejo adecuado del equipo y de la explotación adecuada para potenciar esos medios en el proceso de enseñanza.
