- Es evidente que la situación económica debe ser precaria para que los gobiernos tomen acciones contundentes
Luego de alcanzar un mínimo de 1,451.55 dólares por onza, durante la sesión anterior, precio no visto desde noviembre del 2019, el oro cerró la sesión con ganancias, cotizando en 1,529.17 dólares por onza, lo que equivale a un aumento de 0.99% en su precio. Hay que mencionar que el precio del oro ha estado presionado a la baja en días previos, pues los participantes del mercado se encontraban buscando liquidez derivado de las crecientes preocupaciones sobre los costos que el brote del coronavirus tendrá sobre el crecimiento económico global.
El oro es un activo refugio que típicamente incrementa su demanda y precio en escenarios de alta incertidumbre. No obstante, el metal precioso tiene una menor liquidez que el resto de los activos refugio, por lo que en escenarios de alta volatilidad y amplias pérdidas en los mercados de capitales, los inversionistas prefieren tener dinero en efectivo.
Lo anterior se vuelve evidente en la volatilidad que el precio del oro ha tenido en las últimas semanas, pues se ha posicionado en niveles no vistos desde el 2013, cuando Europa se encontraba en crisis. De acuerdo con Bloomberg, hoy la volatilidad de 30 días fue de 30 unidades, lectura significativamente alta para el oro. Estos movimientos suceden cuando hay riesgos de que la actividad económica mundial se acerque a una recesión.
Por su parte, los metales industriales cerraron la sesión con pérdidas ante el incremento en la percepción de riesgo global, pues el mercado espera que la economía mundial pueda entrar en recesión, destruyendo la demanda global por metales.
Las preocupaciones han aumentado derivado de todas las políticas monetarias y fiscales expansivas que los gobiernos y bancos centrales han comenzado a implementar. Típicamente, estas medidas llevan al precio de los metales industriales al alza, pues son utilizadas para incentivar el crecimiento económico, lo que a su vez aumenta la demanda por dichos commodities. No obstante, el mercado se encuentra sumamente nervioso pues es evidente que la situación económica debe ser precaria para que los gobiernos tomen acciones contundentes.
Hay que recordar que el domingo, la Reserva Federal decidió recortar la tasa de interés a un rango entre 0% y 0.25% de forma extraordinaria, el segundo movimiento de este tipo en menos de 15 días. Por su parte, se anunció un movimiento concertado con los bancos centrales de Canadá, Inglaterra, Japón, el Banco Central Europeo y el Banco Nacional de Suiza, para recortar a 25 puntos base las líneas de swap de dólares.
Ante esto, el cobre cerró la sesión cotizando en 5,128.5 dólares por tonelada métrica, lo que equivale a una reducción en su precio de 2.80%. En la sesión, el metal industrial alcanzó un mínimo de 5,203.75 dólares por tonelada métrica, nivel no visto desde noviembre del 2016. Lo anterior se debió a que se está comenzando a observar un desequilibrio en la oferta y la demanda pues los inventarios en el London Metal Exchange crecieron 22.59% en la sesión a 220,325 toneladas.
El zinc y el aluminio cerraron la sesión cotizando en 1,871 y 1,630.25 dólares por tonelada métrica con contracciones de 3.66% y 1.78% en su precio. En la sesión, el zinc tocó un mínimo de 1,870 no visto desde mayo del 2016, mientras que el aluminio tocó un precio 1,627 dólares por tonelada, no visto desde octubre del 2016.
El precio del níquel se contrajo en 1.30% y cerró cotizando en 11,780 dólares por tonelada métrica.
Los productos agrícolas cerraron la sesión con resultados mixtos. Por un lado, la soya y el trigo finalizaron con ligeras ganancias ante una compara de oportunidad de los inversionistas, luego de que ambos tocaran mínimos anuales. Durante la sesión anterior, el trigo tocó un mínimo de 4.91 dólares por bushel, no visto desde octubre del 2019 y la soya tocó un mínimo de 8.21 dólares por bushel, precio no visto desde mayo del 2019.
El trigo cerró la sesión cotizando en 4.99 dólares por bushel, lo que equivale a un ligero aumento en su precio de 0.25%, mientras que el precio de la soya se aumentó en 0.30% y cerró cotizando en 8.24 dólares por bushel
Por el contrario, el maíz cerró la sesión cotizando en 3.44 dólares por bushel, lo que equivale a una reducción de 3.03% en su precio, ante la expectativa de que el coronavirus dañe la demanda del grano. El maíz tocó un mínimo de 3.42 dólares por bushel, precio no visto desde septiembre del 2018.
Gabriela Siller
