En Aguascalientes los efectos negativos de la contingencia sanitaria –que se presentaron en todo el país- se combinaron con las pérdidas por la cancelación de la Feria Nacional de San Marcos y los problemas que se presentaban por la crisis económica independiente de la situación epidemiológica, por lo que el estado podría ser uno de los más afectados en el país.
Al respecto, el diputado local por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), Luis David Mendoza Esparza, presidente de la comisión de desarrollo económico y turismo del Congreso del Estado, presentó una propuesta para que el gobierno federal regionalice los efectos negativos de situaciones como la presentada, y con base en eso destine partidas de recursos extraordinarios.
Mendoza Esparza indicó que la propuesta se debe a que “vimos las cifras que dejaron de ingresar al estado por la cancelación de la feria, y estamos esperando que, de aprobarse el punto de acuerdo, el gobierno federal tenga el sentido común, la sensibilidad, de valorar el impacto que tuvo esta cancelación, y actúe en consecuencia, destinando una cantidad importante de recursos”.
Señaló que esta contingencia vino en el peor momento, puesto que varios sectores “estaban, con mucho esfuerzo, tratando de sobrellevar esta crisis”, la cual se agudizó debido al paro de actividades –posterior a la cancelación de la feria-; lo anterior, aunado a la desconfianza por parte de los turistas extranjeros, tuvo un impacto negativo en la economía.
Al cuestionar si, por esta conjunción, Aguascalientes pudiera ser uno de los estados más afectados en el país por esta situación, el legislador priísta incluso señaló que “en proporción, sería el más, porque ningún estado de la República tiene un evento como la feria y el ingreso que esto representa”.
Comentó que es por esto que en la propuesta que presentó, incluso se pide que Aguascalientes se declare en emergencia económica, para poder conseguir los recursos federales, los cuales podrían servir en dos caminos: echar a andar todo lo que falta en cuanto a inversión de obra pública; o a través de la banca de desarrollo y la Secretaría de Desarrollo Económico, y Secretaría de Economía, “generar algún fondo importante para los agentes económicos que participaron en la feria y sufrieron pérdidas”.
Hay que darle el beneficio de la duda a los apoyos de Hacienda
Sobre los múltiples apoyos, por hasta 27 mil millones de pesos, que ha anunciado el secretario de Hacienda, Agustín Carstens, y los cuales pretenden ayudar a paliar los efectos negativos que trajo en la economía –que ya sufría de una crisis independiente- la contingencia sanitaria, indicó que hay que esperar que lleguen de manera efectiva a los sectores más afectados.
Mendoza Esparza indicó que habrá que esperar a que las acciones del gobierno federal se lleven a cabo, para poder monitorearlas y comprobar si están dando los resultados esperados.
Dijo que el exhorto es para que se ejecuten realmente, “porque hemos visto que muchas veces únicamente son anuncios”, por lo que no llegan a quienes deben de hacerlo; agregando que si se van a entregar estímulos fiscales, estos deberán ser para las pequeñas y medianas empresas (PYMES); o en caso de recursos crediticios, “que sean a plazos largos y con tasas de interés bajas.
Apuntó que “yo le daría el beneficio de la duda” para esperar a ver cómo se trabajan estos apoyos, aunque reiteró que lo que es urgente trabajar, es en el recuperar la certidumbre en el país, principalmente en el sector turístico, que fue uno de los más afectados por la emergencia sanitaria, añadiendo que no se deberá regatear ningún recurso “ni ser tan pragmático en la cuestión fiscal”, dado que la emergencia amerita que se relaje la política fiscal, ya que lo que reactiva a las economías “es el gasto público”.
