Una iniciativa como la campaña píntale la raya al cambio climático iniciada por Greenpeace y a la que se sumaron diversas organizaciones de la sociedad civil es muy importante, primero por la cantidad de acciones que los ciudadanos pueden realizar a nivel individual y como agrupación y por otra parte la exigencia que deben hacerse a las autoridades para que cumplan con lo que les corresponde respecto a este tema, comentó en entrevista Luis Fernando Gallardo Cabrera, presidente del Colegio de biólogos.
Esta campaña es muy importante porque todos los ciudadanos tienen que tomar conciencia y saber que desde sus hogares pueden aportar un granito de arena y si a eso se le suma que también los individuos tienen la capacidad de organizarse para así fortalecer las acciones colectivas. “Hay entre la gente mucho desconocimiento de las acciones sencillas que se pueden hacer en lo particular para contener los efectos secundarios del cambio climático y el calentamiento global”.
Todavía hay personas que escuchan este concepto y les parece lejano o creen que la responsabilidad es de los gobiernos, pero en realidad todos y cada una de las personas pueden hacer muchas cosas.
Una de las bases importantes de la contención del cambio climático es la eficiencia energética que se puede poner en práctica desde el hogar, con los focos al cambiarlos de incandescentes por ahorradores, apagarlos cuando no se utilicen, usar adecuadamente el horno de microondas, verificar que el refrigerador sea de los que gastan poca energía o realizar un uso eficiente de las hornillas de la estufa al estar cocinando.
En torno a las exigencias que podrían hacer los ciudadanos al gobierno, está la de buscar mayor cantidad de áreas protegidas, un desarrollo urbano más adecuado a nivel local y estatal, ya a nivel federal la apuesta es porque los legisladores tengan iniciativas que de manera obligatoria favorezcan la protección del medio ambiente y sean aplicables también en los diferentes estados.
Iniciar además una acción conjunta para hacer campañas que desmotiven el uso de los vehículos, aunque al mismo tiempo debe hacerse una mejora en el transporte porque para lograr que los conductores dejen sus autos en la casa requieren de un servicio a costo aceptable, pero de buena calidad, situación que desafortunadamente no se presenta ahora con las condiciones actuales del sistema. “Si no es posible dejar el vehículo hay que mantenerlos en las mejores condiciones y cuando sea posible cambiarlos por las bicicletas”.
En torno precisamente al tema del transporte alternativo, habrá que exigir a las autoridades que construyan ciclovías que brinden toda la seguridad que los ciclistas requieren para circular, ya que según el biólogo Gallardo Cabrera las vialidades actuales son muy riesgosas.
Otra de las obligaciones de la autoridad es también la creación de áreas verdes tanto en la zona urbanizada como fuera de ella, para que así como se compran reservas para desarrollos urbanos que también se adquieran áreas para conservación, precisó el biólogo.
En cuanto a la legislación a nivel federal y local hace falta implementar una legislación que regule el uso adecuado de la energía, el manejo integral de residuos para que cada uno de los involucrados en esta cadena desde la producción hasta el consumo se hagan cargo de lo que les corresponde, buscar formas de incentivar a las empresas que inviertan en tecnología limpia e incluso que los gobiernos municipales y estatales consuman aquellos productos fabricados a través de un proceso responsable con el medio ambiente, principalmente los de construcción que pudieran ser parte de la exigencia para los permisos de nuevos fraccionamientos.
