Para ahorrar energía no basta con cambiar los focos de incandescentes por ahorradores, usar la estufa sólo en los tiempos necesarios y comprar un refrigerador con uso eficiente de la energía; también deben las personas cambiar sus hábitos de consumo porque la mayoría de los productos que compramos utilizaron energía para su fabricación, comentó Humberto Tenorio, presidente de la asociación Conciencia Ecológica.
Esto lo declaró en el marco de la rueda de prensa convocada por Greenpeace para hablar del foro sobre cambio climático, que se realizará hoy, en el teatro de la clínica1, del IMSS y que forma parte de la campaña Píntale la raya al cambio climático en la que se incluyeron varias de las organizaciones civiles ecologistas locales.
Más allá del ahorro en el consumo de energía, se debe hacer conciencia de que la fabricación de diversos productos también la requirieron en su proceso de fabricación y muchas personas caen en excesos al momento de hacer sus compras por desconocimiento o reflexión sobre lo que hay antes de una botella de pet, una bolsa de plástico o los diferentes empaques de los artículos comestibles.
“Cuando no las necesitamos, hay que evitar y rechazar las bolsas de plástico que nos dan a diestra y siniestra porque con eso hacemos también un ahorro de energía”.
No se trata de que las personas dejen de consumir, sino sólo ser conscientes de no caer en excesos y por eso retomó precisamente el ejemplo de las bolsas que parecen tan insignificantes pero llegan a acumularse dentro de las casas sin necesidad alguna de que eso suceda. Hay países en los que incluso las bolsas tienen ya un costo y otros casos en los que fueron prohibidas.
Y las consecuencias no terminan sólo en el consumo de las bolsas, sino que después se vuelven un riesgo para diferentes animales sobre todo las aves y los marinos que las confunden con alimento, las ingieren sin tener la capacidad para digerirlas o se enredan con ellas y se asfixian.
Como participante en la campaña Píntale la raya al cambio climático, Humberto Tenorio destacó la realización de un foro que tenga como tema central este fenómeno mundial pues es indispensable hacer consciente a la ciudadanía de que todos deben participar en la conformación de propuestas nacionales que México lleve a Copenhague, al encuentro internacional donde los países van a comprometerse para cuidar del medio ambiente y sus recursos naturales. “Tendrán que ser propuestas viables y con posibilidades de que se cumplan porque los ciudadanos estarán pendientes de que verdaderamente las acciones del gobierno vayan encaminadas a cumplir con los compromiso que adquieran”.
La atención que esta campaña centra en el gasto de energía es porque precisamente esta acción repercute en la producción de gases de efecto invernadero y a su vez tiene una repercusión en el proceso de cambio climático.
Una alternativa que el ecologista planteó además de las comentadas ya en el ahorro del uso de los aparatos electrodomésticos fue la aireación de la casa que se puede hacer con un sistema básico de construcción de “chimeneas ecológicas”, que consiste en hacer un orificio en el techo, en una esquina, con unos tubos pintados de negro por los que puede salir el aire caliente acumulado en la vivienda.




