El acodo aéreo de mezquite es un proyecto piloto que realizarán las autoridades del municipio en conjunto con el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), con esta investigación se comprobó que se tiene grandes beneficios para el estado desarrollar especies nativas en términos ecológicos. En este momento están en la primera etapa, que es la identificación de los mezquites que van a utilizar para la aplicación de este programa, comentó en entrevista Ricardo Hernández, director de Ecología municipal, de la Secretaría de Servicios Públicos y Ecología.
Uno de los acercamientos del INIFAP hacia el crecimiento y el provecho del mezquite lo hicieron a través de los apicultores donde descubrieron que los frutos de éste son de alta calidad para la producción de miel.
A través de este nuevo sistema de acodo, el director de Ecología confirmó, lo que ya había dicho el activista ecológico Mario Saúl Pérez Chávez, en un año se podrán lograr mezquites y huizaches de un metro y medio o dos metros fuertes y en condiciones de sobrevivir al sembrarse.
“Normalmente un mezquite en un vivero llega a crecer sólo entre 30 y 40 centímetros, pero así son árboles muy vulnerables y sirven de alimento para los animales”.
Lo que llevó al gobierno municipal a interesarse en este proyecto es que finalmente la siembra o preservación de flora nativa ofrece mayores servicios ecológicos que la forestación con otro tipo de especies, “los mezquites son plantas ya adaptadas a las características de la zona, han sobrevivido a los diferentes cambios que ha tenido el estado, producen mayor cantidad de oxígeno, capturan más CO2, entre otros”.
Esta presentación la hicieron en el marco del festejo del día del árbol donde hicieron una siembra de árboles en la escuela de educación ambiental donde tienen el objetivo de hacer un sendero educativo para que los niños de las escuelas asistan y conozcan tanto las especies nativas del estado, como las que no lo son, pero de igual manera se reproducen y tienen un beneficio para el desarrollo ecológico de la región.
“No es que despreciemos a las especies no nativas, pero en la búsqueda de un desarrollo sustentable lo más adecuado es la flora nativa porque se adapta a las condiciones”.
El nombre completo de esta nueva técnica es “acodo aéreo de mezquite” y consiste en hacer unas ranuras en las ramas del mismo árbol, colocarle enraizador y en menos de seis meses estará ya lista para llevarlo a crecer en un vivero otros seis meses y al final es cuando las plantas estarán listas para sembrarse.
En este período van a requerir el apoyo tanto de estudiantes que hacen servicio social, del mismo personal de la Secretaría y miembros de las organizaciones civiles que estén interesados en sumarse a esta iniciativa. La cantidad de personas que van a requerir para el cuidado de los árboles va a depender de la fronda y de las condiciones de cada árbol, pero ellos prevén que sean alrededor de 80 personas.
Como en este momento están en el proceso de localización de los mezquites que van a servir para este programa, todavía no tienen bien determinada la cantidad de mezquites que pudieran reproducirse en este primer año.
Ricardo Hernández comentó que las áreas más propicias para incluir en este proyecto, son las zonas de los arroyos, está previsto El Cedazo, el parque México y están identificando otras áreas donde se encuentren mezquites de manera accesible para poder cuidarlos de manera constante durante este periodo de preparación.
Es necesario que los árboles estén en áreas accesibles porque van a requerir de un riego constante, lo ideal será una vez localizados los árboles que van a usarse, podarlos e identificar cuántos acodos se pueden hacer por cada árbol.
Todavía no tienen una fecha fija para empezar con la realización de los acodos, pero se tiene contemplado durar dos semanas en la localización de los mezquites para a inicios del mes de agosto acodar y aprovechar el periodo de lluvias, para tener estos árboles en el año próximo y así poder reforestarlos.
