- La situación comienza en el hogar y se traslada a las calles
- La pobreza genera el comportamiento ante la falta de oportunidades
Jorge de la Peña Martínez, asesor de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), señaló que aproximadamente el 60 por ciento de los niños en México son víctimas de violencia en la calle o en el hogar, siendo éste el lugar donde más se les somete a golpes, abuso sexual y sicológico. Esto durante la visita que hiciera a nuestro estado, con motivo del XV aniversario del Hospital General de Zona Núm. 2 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Durante su ponencia el también catedrático de la UNAM, señaló que el desarrollo económico y la falta de oportunidades son factores importantes en el desencadenamiento de la violencia social, por lo que aquellas personas que viven algún tipo de pobreza están constantemente expuestas a la violencia, citó por ejemplo a los menores que no tienen hogar.
“El hecho de que un niño se encuentre como muy pomposamente llaman en situación de calle, que para mí es un niño de la calle, es un hecho per se violento” sentenció el asesor de la ONU.
Denunció que en todo el país no existen programas “realmente efectivos” para atender a las personas que fueron víctimas de la violencia, siendo solamente una bandera política la creación de direcciones encaminadas al tema, ya que no se cuenta con especialistas calificados para atender a estas personas, dando como resultado el incremento de la delincuencia, la drogadicción y las enfermedades mentales.
De la Peña Martínez, indicó que es difícil señalar cifras precisas sobre la violencia, pues es un tema que se suele tener oculto, pero señaló que de acuerdo a las experiencias nacionales e internaciones se puede decir que el seno familiar es donde se da más violencia. Explicó que es por ejemplo la casa donde más se da el abuso sexual de menores, generalmente por un familiar.
Por ello señaló que es en el hogar donde debe empezar el respeto a los derechos humanos, pero esto generalmente no se da por la falta de preparación de los padres, “se tienen hijos por tenerlos”, sin tener educación, cultura y la capacidad para criarlos, “no se les da la atención adecuada y va a actuar muchas veces por sentido común y por las tradiciones sociales”.
Asimismo, refirió que la cuestión económica en el seno familiar, es un factor de violencia, ya que en aquellas casas en las que el jefe de familia no tiene un empleo estable, por ende no se tiene acceso a la salud y la educación, insertando a la sociedad de por sí deteriorada, ciudadanos sin preparación, sin valores, creando una especie de círculo vicioso.
La guerra con el narcotráfico ha sumado a la violencia
El especialista en temas sobre violencia, aseveró que es innegable que ha incrementado la violencia en el país. “Se está viviendo una coyuntura histórica por el narcotráfico y la globalización, anteriormente había problemas con este tipo de situaciones pero eran particulares, ahora se ha trasladado a violencia callejera, venganzas, influyendo en la sociedad civil”.
Apuntó que en el siglo pasado las guerras afectaban sólo al 6 por ciento de la población civil, actualmente inciden en el 90 por ciento de la población, “y si partimos de la premisa de que actualmente vivimos una guerra contra el narcotráfico, podemos deducir que la población civil está expuesta”.
De la Peña Martínez subrayó que es posible combatir la violencia, indicó que actualmente existen diversos programas sociales para reducir esta problemática, pero insistió que hace falta voluntad política, para que funcionen de verdad. En el caso de Aguascalientes resaltó el trabajo que se ha hecho para combatir la violencia infantil por medio de dependencias.
Destacó que el combate a la delincuencia no es sólo es una cuestión del Estado, sino que también es cuestión de la sociedad civil. Enfatizó que las organizaciones civiles han tenido un trabajo muy importante al respecto.
