- 114 recomendaciones todavía no son atendidas, algunas fueron ignoradas
- “El Congreso debe reformar la Ley del Sistema Estatal Anticorrupción y buscar que las recomendaciones sean vinculantes en cierta medida, que traigan aparejada alguna sanción”
Esta semana, Aquiles Romero González, titular de la Secretaría Ejecutiva del Sistema Estatal Anticorrupción (SESEA) dio a conocer que actualmente hay 114 recomendaciones para prevenir hechos y actos de corrupción que no han sido atendidas por diversos entes públicos, entre ellos, los más comunes son municipios, organismos paramunicipales y organismos descentralizados.
Si bien se dio a conocer que incluso algunos de esos entes públicos ni siquiera contestaron a la SESEA, al tratarse de recomendaciones no vinculantes, que buscan mejorar los procesos y las estructuras internas como parte del combate a la corrupción en materia de prevención, aun cuando los entes no responden, no se les puede atribuir una falta o una responsabilidad administrativa como sanción.
Sobre ese tema, el abogado Eric Monroy Sánchez, expresidente del Comité de Participación Ciudadana (CPC), opinó que desde la vía legislativa se debe buscar la manera en hacer que el no cumplimiento de las recomendaciones emitidas sí sea sancionado, es decir, que sean recomendaciones vinculantes.
“El que estos entes no las atiendan, perjudica mucho al sistema -anticorrupción-, un sistema que nació creyendo que podríamos hacer algo para atacar frontalmente a la corrupción, y al momento en que se difunde ese mal ejemplo de no atender las recomendaciones, creo que le abona para mal al sistema”, comentó en entrevista.
Y agregó: “yo creo que el Congreso debe reformar la Ley del Sistema Estatal Anticorrupción y buscar que las recomendaciones sean vinculantes en cierta medida, que traigan aparejada alguna sanción, algún apercibimiento, porque si no vamos a seguir creando letra muerta. El Congreso tiene esa problemática en sus manos, y la debe de atender de manera urgente”.
Frente a esa posibilidad, Eric Monroy concluyó que la SESEA debe tener autocrítica en su operación para seguir avanzando en la lucha contra la corrupción.




