- Las autoridades se han hecho de la vista gorda y no han exigido lo que deben
- La modernización puede que no sea un hecho como la credencialización de estudiantes
El grave problema del transporte público en Aguascalientes es que no existe una plataforma jurídica que les permita a los usuarios del servicio tener una protección. Las consecuencias lógicas de esta impunidad son lagunas jurídicas, un gran vacío por el desinterés del gobierno y la rapiña de los transportistas con lo que sólo se ha logrado el beneficio de los concesionarios, comentó Manuel González Vázquez, presidente del consejo de administración del Movimiento Popular por la Emancipación Social (MOPES).
El gobierno perdió la brújula en materia económica sobre todo en relación a lo referente a la dinámica familiar; el incremento al transporte público se autorizó porque supuestamente se cumplió ya con el requisito de la conformación del fideicomiso, sin embargo en términos reales este fue un cambio que pega directamente a los ingresos de los hogares.
El gobierno permitió en el peor momento del año para hacer un nuevo aumento a la tarifa, cuando los padres de familia están hasta el cuello con los gastos escolares, lo que vemos es un manejo pésimo de la economía, un solapamiento insistente, una necesidad irremediable del gobierno por darle favoritismo a los transportistas y en particular a la gente de ATUSA.
“Al final los más afectados van a ser los estudiantes porque en si el incremento pega a todo, desafortunadamente el salario mínimo no se ha movido ni un ápice, ni se comparan en lo más mínimo con los aumentos que se han tenido con relación al transporte público”.
A final de cuentas el balance es negativo porque el transporte público, siguió siendo durante toda esta administración una piedra en el zapato para las autoridades, porque sin duda hubo otros rubros que también quedarán con muchos pendientes, el transporte fue una promesa y al final de cuentas ninguna de las soluciones propuestas serán una realidad.
Aunque a través del fideicomiso se prometió que se van a mejorar las condiciones de las unidades, la realidad por el momento es que hay alrededor de 170 autobuses en malas condiciones, son literalmente “latas rodantes” por las que ahora tendrán que pagarse seis pesos para un traslado por cualquier cantidad de tiempo y distancia que se recorra.
Para González Vázquez, el proceso de modernización era más sencillo de lo que ahora se ha querido manejar, había mecanismos viables para lograrlo, sin embargo les parece que será una situación similar a lo que sucedió con la entrega de credenciales de descuento para estudiantes donde las autoridades más bien actuaron al margen.
Al hablar del servicio de los autobuses mencionó como en el caso de la entrega de las credenciales de descuento para los estudiantes fue una cuestión de voluntad política y de la propia participación del Instituto de Educación de Aguascalientes (IEA) pero finalmente permitieron que los concesionarios hicieran lo que quisieran.
“No vemos que se esté dando un mecanismo real de mejora, nosotros hemos sido siempre insistentes en una visión incluyente desde el punto de vista emprendedor, empresarial (…) esto tenía que ser una solución integral donde incluso los empresarios que se dedican a la venta de este tipo de unidades hicieran un plan conjunto con los dueños de las concesiones, el gobierno y hasta con el mismo gremio”.
Más del 30 por ciento de las unidades están en malas condiciones y por ley debían haber salido ya de uso y no están, este asunto es nuevamente una serie de beneficios, canonjías y privilegios para los concesionarios. El problema es que la situación en estos términos sigue siendo la misma y el aumento es ya un hecho en el servicio.
