En el círculo cercano de la gobernadora Evelyn Salgado pesan y operan sus familiares: su padre, el senador Félix Salgado Macedonio, realiza negociaciones a nombre del gobierno del estado y gira instrucciones a los funcionarios de la entidad; su hermana Liz Adriana Salgado Pineda está al frente del DIF, organismo que en dos años recibió un presupuesto equiparable al de los poderes Legislativo y Judicial locales; y su pareja, Rubén Hernández Fuentes, es coordinador general operativo, segundo cargo en importancia en la Oficina de la Gubernatura, con salario y prestaciones que aumentaron de manera significativa en sólo tres meses.
En el primer tramo de su sexenio la gobernadora Evelyn Salgado, junto con su familia y personas de su círculo cercano, ha afianzado el poder y el control político en el estado.
La dinastía que encabeza el senador Félix Salgado Macedonio tiene también aliados y operadores en el Tribunal Superior de Justicia, el Congreso del estado y en instituciones como Morena y la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG).
La gobernadora y Félix Salgado se han apoderado de las instituciones y “se están despachando con la cuchara grande”, observa Salvador Rangel, obispo emérito de la diócesis de Chilpancingo-Chilapa.
“El Salgadismo es la derrota del proyecto que se venía construyendo en Guerrero. En la medida que viejos actores retoman el control de la política, no hay transformación”, reprocha Luis Enrique Ríos, secretario de Organización del primer Comité Ejecutivo Estatal de Morena (2012-2015).
Evelyn Salgado, primera mujer en gobernar el estado, prometió durante su toma de protesta, el 15 de octubre de 2021, terminar de raíz con la corrupción y promover la transparencia. “No es un cambio de estafeta, es una transformación radical de la vida política y social de nuestro estado”, ofreció.
Citó al expresidente Juan Álvarez, originario de Atoyac: “Servir no es servirse”. En su gobierno, dijo, se diría adiós a los privilegios.
Pero no deja de pesar la sombra y participación de su padre, Félix Salgado Macedonio, expone Marco Antonio Adame Meza, director del Instituto Internacional de Estudios Políticos Avanzados Ignacio Manuel Altamirano de la UAG.
El senador ha asumido por fuera negociaciones a nombre del gobierno estatal mientras que, en el primer círculo del gobierno de Evelyn, su pareja y su hermana fueron designados en puestos estratégicos.
Liz Adriana Salgado Pineda está al frente del DIF estatal, organismo que sólo en dos años recibió un incremento de 128 millones de pesos de presupuesto, con relación al periodo anterior. En 2021, último año de gobierno de Héctor Astudillo, el presupuesto para el DIF guerrerense fue de 725 millones 222 mil pesos y en 2023 llegó a 853 millones 211 mil pesos.
El recurso es equiparable al de los poderes Legislativo y Judicial estatales, que ejercen este año 929 millones 736 mil pesos y 967 millones 37 mil pesos, respectivamente, y 25 veces superior al de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas (de 33 millones 577 mil pesos) en una entidad que registra en lo que va del año cuatro homicidios diarios y mil desplazados por la violencia criminal.
La gobernadora no solamente mantuvo el salario neto que tenía su antecesor, de 73 mil 141.79 pesos, sino que, al iniciar su administración, su actual pareja Rubén Hernández Fuentes fue nombrado coordinador general operativo, segundo cargo en importancia en la Oficina de la Gubernatura, responsable de la imagen institucional, giras y comunicación social.
Antes de su gobierno, Evelyn Salgado estuvo casada con Alfredo Alonso Bustamante, hijo del empresario Joaquín Alonso Piedra, El Abulón, detenido en 2016, acusado por el gobierno federal de ser operador financiero y testaferro del cártel de los Beltrán Leyva en Acapulco.
Ya en el arranque de su administración, se hizo pública la relación de Evelyn con Rubén Hernández Fuentes, cuya categoría y salario a partir de su ingreso a la nómina del gobierno estatal fue subiendo en sólo tres meses.
Hernández Fuentes recibió a principios de 2022 el nombramiento como director general del Poder Ejecutivo; para el segundo trimestre fue ascendido al nivel de subsecretario de Despacho del Poder Ejecutivo. Su sueldo bruto, de 38 mil 921 pesos (29 mil 612 pesos netos) pasó a 58 mil 16 pesos mensuales (42 mil 641 pesos netos), sin contar compensaciones, primas vacacionales y bonos que no reporta la Secretaría de Finanzas y Administración.
La Oficina de la Gubernatura, encabezada hasta mayo pasado por el exfuncionario de aduanas y promotor de Claudia Sheinbaum, Jesús Eugenio Urióstegui García, fue recibida con un presupuesto de 18 millones 607 mil pesos y ha llegado este año a los 33 millones 95 mil pesos, un aumento de 14 millones 488 mil pesos.
La Unidad de Transparencia de la dependencia reportó –en respuesta a una solicitud de información hecha por el reportero– que Rubén Hernández cumple con los requisitos establecidos en el artículo 19 de la Ley Orgánica de la Administración Pública de Guerrero: ser ciudadano mexicano, tener más de 21 años y poseer título y cédula profesional de licenciatura “en áreas afines a las de su competencia”.
Las funciones del coordinador general operativo son mantener informado al titular de la Oficina de la Gubernatura de la atención a los asuntos que le encomiende directamente la mandataria; supervisar el diseño y difusión de la imagen de la gobernadora, a sus asesores y el procesamiento de datos mediante sistemas computacionales para modernizar la Oficina.
No obstante, la ficha curricular de Rubén Hernández emitida por el gobierno dice que su perfil profesional es de médico general y que sus últimos empleos de 2005 y 2006 fueron brindar consultas en la clínica San Antonio y como encargado del programa de referencia y contrarreferencia en la dirección de Salud de Chilpancingo.
Además, la ficha oficial omite su perfil empresarial. Hernández Fuentes ha sido representante legal de la Compañía Distribuidora y Constructora Zedna, proveedora y contratista del gobierno del estado en el periodo 2015-2021, del gobierno de Michoacán, ayuntamientos y organismos públicos como el Instituto Electoral de Guerrero.
En septiembre de 2017, la empresa Multiservicios y Construcciones Empresariales Álamos denunció fraude y violación a la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público por parte de la Compañía Distribuidora y Constructora Zedna, representada por Rubén Hernández, debido a que sin registro fue avalada en una licitación para rehabilitar y equipar comedores del DIF Guerrero.
En ese entonces, las cuatro empresas que cumplieron con la convocatoria acusaron al Comité Dictaminador, integrado, entre otros funcionarios, por el entonces director de Finanzas Isaac Cabrera, de incurrir en actos de corrupción.
Rubén Hernández todavía se ostenta como representante de la empresa.
La mano de Félix
Por su parte, el senador Félix Salgado también ha incursionado como empresario de medios de comunicación para abrirse paso en el poder político. En 1981 dirigió en Iguala el periódico Acción y en 2009 compró la franquicia del diario La Jornada.
La Jornada Guerrero fue dirigida por Salgado Macedonio hasta 2017 por medio de Editorial Eve. Su representante legal era María del Sol Salgado Pineda, otra hija del político.
Al llegar Evelyn a la gubernatura, La Jornada Guerrero cambió a periódico El Guerrero y María del Sol Salgado asumió la dirección general.
El rotativo presenta todos los días boletines y fotografías de la gobernadora, funcionarios y dependencias del gobierno del estado, pero se desconoce el monto que recibe por publicidad gubernamental.
Proceso solicitó la información vía ley de transparencia a la Secretaría de Finanzas de la entidad y a la Oficina de la Gobernadora, pero la respuesta fue que “previa búsqueda exhaustiva” dicha información no se encontró.
Se buscó a través del director de Comunicación Social del estado, René Posselt, una posición sobre la contratación de la pareja de la gobernadora y la información sobre el gasto publicitario. El funcionario respondió inicialmente proponiendo una reunión, pero después ya no atendió los mensajes ni las llamadas.
Félix Salgado, por su parte, ha negociado en conflictos y gira órdenes como si fuera el gobernador. En noviembre de 2021 maestros bloquearon la avenida Lázaro Cárdenas en Chilpancingo para exigir al secretario de Educación, Marcial Rodríguez Saldaña, atención a demandas laborales.
El cierre de las vialidades se realizó cerca del Café Punta del Cielo, donde el legislador tenía su oficina. El senador de Morena se presentó a dialogar con los manifestantes y desde su teléfono ordenó al secretario Marcial Rodríguez agendar una reunión con los maestros, quienes se retiraron del lugar.
Rodríguez Saldaña, titular de Educación, fue dirigente estatal de Morena y acompañó en sus campañas a Félix y Evelyn Salgado.
El 11 de febrero de 2022 el senador intervino ante un bloqueo que estudiantes de la Normal Rafael Ramírez mantenían en la autopista del Sol. Ahí se reunió con funcionarios estatales y les dio instrucciones. Y en el presente año, el 5 de marzo, también hizo acto de presencia para reinstalar a trabajadores del Congreso estatal que cumplían una semana de haber tomado las instalaciones del recinto.
“Salgadismo”
Los tentáculos de la familia Salgado se han extendido a los otros dos poderes: el Judicial y el Legislativo.
El jurista originario de Iguala y presidente del Tribunal Universitario de la UNAM, Eduardo López Betancourt, presentó en octubre de 2021 al magistrado Raymundo Casarrubias Vázquez con Félix Salgado y con la gobernadora electa.
Casarrubias –con 34 años de servicio– fue elegido en noviembre de 2021 presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) del Estado por un trienio. Desde entonces, el titular del Poder Judicial acompaña en actos públicos a la gobernadora.
En 2018, cuando todo indicaba que López Obrador ganaría la Presidencia, Morena convocó a académicos, líderes de sindicatos, organizaciones sociales y empresariales para ofrecer candidaturas.
A Yoloczin Lizbeth Domínguez Serna, presidenta de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (CANACINTRA) en Acapulco, el líder estatal Pablo Amílcar Sandoval le propuso una diputación por Acapulco y ganó.
En 2021 la legisladora rompió con Amílcar porque éste se quedó con la candidatura a una diputación federal en el distrito 4 de Acapulco. Entonces le asignaron una candidatura para una diputación plurinominal y por esa vía llegó al Congreso.
De nuevo en la Cámara estatal, pero ahora con el respaldo de la gobernadora Evelyn Salgado y del senador Félix Salgado, Yoloczin Domínguez fue nombrada presidenta de la Junta de Coordinación Política, cargo desde donde se promueve como aspirante de Morena a la alcaldía de Acapulco.
La familia Salgado ha tomado además el control de Morena y de instituciones como la Universidad Autónoma de Guerrero.
Jacinto González Varona, legislador con licencia, fue avalado como presidente estatal de Morena en septiembre de 2022 por una mayoría de consejeros estatales que pertenecen a la corriente de Félix Salgado. Desde ahí el dirigente ha salido frecuentemente en defensa del gobierno de Evelyn.
En abril fustigó públicamente al obispo emérito Salvador Rangel por la intervención de este ante líderes de la organización criminal La Familia Michoacana para que la Semana Santa en Taxco se desarrollara en paz.
“No es buena señal que representantes de la iglesia se manifiesten a favor de una negociación, diálogo o encuentro con las células del crimen. Rechazamos este tipo de declaraciones que pretenden desestabilizar y desacreditar un gobierno legítimo. Estamos frente a un escenario frágil, donde peligrosamente la Iglesia juega un papel de aliado y cómplice del crimen organizado y ello no abona a la paz ni a la seguridad que merecen las y los guerrerenses”, criticó el dirigente morenista.
En tanto que el Salgadismo ha asegurado también el control de la UAG por medio de un nuevo aliado, Javier Saldaña Almazán, rector electo por tercera ocasión consecutiva, a pesar de que la Ley Orgánica universitaria indica que ese cargo sólo puede reelegirse en una ocasión.
Saldaña Almazán ganó en 2013 la elección como candidato único. Y en 2016 con una reforma al reglamento universitario aseguró su reelección. Este año, sólo a él se le permitió el registro.
Ingobernabilidad
Para el obispo emérito Salvador Rangel no hay diferencia en cuanto al ejercicio de gobierno de Morena, con respecto a su antecesor priísta.
Incómodo para el gobierno de Héctor Astudillo, el obispo considera de entrada que hay una falta de gobernabilidad en regiones como Tierra Caliente.
“No pueden entrar allá el Ejército o la Guardia Nacional porque la misma gente defiende a los narcos. Y así podemos hablar de muchos lugares donde hay este rechazo hacia las corporaciones policiacas. Vean las estadísticas de asesinatos en Chilpancingo, Acapulco, Iguala. ¿Cómo se atreven a decir que estamos bien?, están mintiendo, nos damos cuenta de lo que está sucediendo”.
El líder religioso dice que el combate a la corrupción es sólo discurso. “La verdadera corrupción se está dando (en) la relación de los políticos con el crimen. Gobierno estatal, presidentes municipales, incluso en el Congreso, ¿cuántos padrinos tienen del narcotráfico?”, dice.
Y tira otro dardo: “La gobernadora y don Félix Salgado se han rodeado de puros amigos y los favores han sido para ellos. Son figuras públicas que deberían dar un ejemplo. Se ha visto cómo se han apoderado de instituciones y lo que ha sucedido es un bandidaje desmedido, las manos no se las han amarrado y se están despachando con la cuchara grande”.
