Circunstancias
“Los ciclos terminan y llegan los momentos de definiciones. Así que dadas las circunstancias actuales, hoy es mi último día en esta empresa y será la última vez que esté frente al noticiario ‘Azucena a las 10′”, dijo Azucena Uresti al despedir la transmisión de su espacio informativo en Milenio; de inmediato comenzaron los rumores, sobre todo en redes, se culpó al gobierno de Andrés Manuel López Obrador, la “oposición” aprovechó para acusar de dictador al jefe de la Cuarta Transformación, por ejemplo, el expresidente Felipe Calderón posteó que la salida de la conductora “es un reflejo del autoritarismo presidencial y de la dictadura a la que aspira, también Latinus de Carlos Loret de Mola insinuó que la renuncia se debía a la censura que aplica López Obrador.
Aclaraciones
De acuerdo a Grupo Milenio, la renuncia de Azucena Uresti fue en mutuo acuerdo, un comunicado de la empresa informa que “la periodista nos comunicó que en los próximos días asumirá la conducción de un programa matutino en el cuadrante radiofónico de alcance nacional. Le deseamos éxito.” El daño ya estaba hecho. Como desde hace varios días hay una confrontación directa entre algunos comunicadores y López Obrador, cualquier asunto se toma para hacer campaña a favor o en contra de la Cuarta Transformación. Felipe Calderón tuvo que recular sobre sus acusaciones y, de nuevo en X, reconoció que Azucena Uresti salió del canal por una “decisión profesional” y no por expulsión de la empresa, sin embargo, en su reculamiento, el expresidente no dejó de aprovechar la oportunidad de rayar a López Obrador, pues finalizó sentenciando “Reitero mi solidaridad con ella y que el contexto de agresión en contra de ella, de Carlos Loret de Mola, Ciro Gómez Leyva, Brozo y otros es un ominoso signo de autoritarismo presidencial”.
Con todo respeto
López Obrador rechazó las acusaciones de censura e invocando su “derecho de réplica” pidió a Azucena Uresti que explicara las razones por las que se fue de Grupo Milenio porque la periodista “dejó a entender que fue víctima de una censura” y “nosotros respetamos el derecho de manifestación libre de las ideas” agregó el presidente antes de señalar que conoce al dueño de Milenio, Francisco González, es su amigo pero “nunca me atrevería, no lo he hecho nunca en mi vida, hablarle al dueño de un medio de comunicación para que censure a un periodista”.
Complicidad
Es cierto, no hay pruebas para señalar a López Obrador como un dictador que solicite la cabeza de los periodistas, porque, aunque digan que no son iguales, el método lopezobradorista es igualito al de sexenio anteriores, cerrar la llave de la publicidad oficial, repartir grandes sumas a los que o quieren bien o funcionan como sus voceros, y no se le puede llamar práctica dictatorial a lo que se hace desde Palacio Nacional porque los gobiernos estatales y municipales hacen exactamente lo mismo, privilegiando con el presupuesto a quienes viven arrodillados a la voluntad de la gobernadora o los presidentes municipales, sin hacer distinción alguna entre halago o zalamería y la difusión de información oficial; si bien López Obrador no puede ser tachado de dictador, sí se le puede acusar de cómplice de que México sea un país con condiciones terribles para desarrollar profesionalmente el trabajo periodístico, el presidente, sin mesura alguna denigra a quienes los critican desde los medios, vapulea reporteros, y aparte de los periodistas asesinados, de acuerdo a un informe de Reporteros Sin Fronteras, el año pasado desaparecieron 31 periodistas en el país, la mayor cantidad de periodistas desaparecidos en el mundo. En ese sentido, el gobierno de López Obrador se comporta igual que Max Cortázar y Javier Lozano cuando actuaron en contra de José Gutiérrez Vivó para desaparecer Monitor de Radio Red.
Cuenta conmigo
Para cerrar el comentario sobre este episodio de la picaresca nacional, revisando la cuenta en X de Azucena Uresti, tras su despedida del noticiero televisivo, la periodista no ha asumido la responsabilidad de aclarar las circunstancias de su salida y sólo ha replicado a quienes lamentan su salida del aire en televisión con notas amables en las que señala que desde donde sea contarán con ella… En fin, a seguir sumando a este discurso polarizador en que nos ha hundido López Obrador de conmigo o contra mí, a seguirle haciendo juego a la prédica presidencial desde la mañanera; lo peor está por venir, porque en esta época de intercampaña, el único que tiene permiso para hablar y presumir es López Obrador, mientras que los precandidatos Jorge Álvarez Máynez, Xóchitl Gálvez y Claudia Sheinbaum tienen que guardar silencio para que sólo los partidos hablen de sí mismos, sin hacer propuestas, sin convocar al voto y sólo exaltando sus virtudes, así que nos esperan unas larguísimas semanas escuchando a Marko Cortés confundiendo cinismo con transparencia, a Alejandro Moreno llamar fortaleza a la coladera que se ha vuelto el PRI, a Jesús Zambrano esconder la disminuida militancia con promocionales chistosos y a Morena y sus aliados haciendo trampa.
Así no
A los prianrredistas y Movimiento Ciudadano, el INE los tiene super vigilados, así que difícilmente les permitirán en sus anuncios hablar de Xóchitl Gálvez o de Jorge Álvarez Máynez, mientras que el instituto que preside Guadalupe Taddei tiene manga ancha con los partidos aliados al presidente y, para muestra el botón de la difusión del acto en que Claudia Sheinbaum recibió su constancia como candidata a la Presidencia de la República por la alianza Morena-PT-PVEM, el domingo al rendir protesta como candidata oficial, los medios difundieron el mensaje de Sheinbaum Pardo, el mismo de toda la precampaña en que copia los lemas de López Obrador acerca de que por el bien de todos primero los pobres, que no puede haber gobierno rico con pueblo pobre y que el poder sólo es virtud cuando se pone al servicio de los demás. Si eso no es violar la intercampaña, ¿qué lo será?, pero al INE parece no importarle.
Lo mismo pero más barato
Esto de violar la intercampaña ocurre desde el primer día de veda para los precandidatos, cualquier pretexto es bueno para echarle un empujoncito a Claudia Sheinbaum, como la adición de Eruviel Ávila, exgobernador del Estado de México y consentido de Enrique Peña Nieto, quien el viernes se incorporó a la Cuarta Transformación a través de la rémora del Partido Verde Ecologista de México, el viernes en Ecatepec,Manuel Velasco, líder verde y exposo de Anahí le abrió los brazos y toda la cuerpa al expriista, quien cínico declaró “Hoy me sumo al Partido Verde que más que un partido, es toda una familia. La Familia Verde. Desde el 2002 me ha acompañado en las elecciones que he competido y juntos hemos ganado”… pues sí, todo queda en familia, pero en la de Don Corleone.
La del estribo
Nomás no entienden, a pesar de que la asociación Raíces Hidrocálidas cuenta con una medida precautoria que emitió la Comisión Estatal de los Derechos Humanos de Aguascalientes para el uso pleno de las instalaciones de un espacio en Tres Centurias, ayer se les impidió el uso de energía eléctrica y agua, nomás que en esta ocasión la funcionaria encargada del espacio, Andrea Chávez, envió a uno de sus empleados a poner los candados, como no se pudo colar a las candidaturas de Acción Nacional, no vaya a ser que ni un premio de consolación le toque. Qué necedad.
@PurisimaGrilla
