El concierto estaba programado a las 20:30 horas como todos los conciertos de la OSA, pero en esta ocasión el festín musical inició a las 20:53, es decir, 23 minutos después de lo anunciado, alrededor de las 20:45 el sonido local anunció algo, o por lo menos intentó decir algo, pero fue imposible entender una palabra, finalmente, siete minutos antes de las 21:00 horas el maestro Revueltas apareció en el escenario para dar inicio al octavo concierto de temporada de la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes.
Originalmente se había programado un concierto con tres obras, iniciando con la Obertura Rosamunde de Franz Peter Schubert, después Los Pájaros de Ottorino Respighi, y finalmente la Sinfonía en re menor WAB 100 No.0 de Anton Bruckner, por cierto, eso de WAB corresponde al catálogo de las obras de este compositor conocido como el Trovador de Dios, y en alemán es Werkverzeichnis Anton Bruckner realizada por el musicólogo Renate Grasberger, y que significa, catálogo obra de Anton Bruckner, y es la clasificación realizada de toda su producción musical. En el caso de Bruckner, como otros compositores, Bach, Mozart, Schubert y algunos más, no se utiliza la nomenclatura de Op (opus, obra) para la clasificación de su catálogo musical.
Por alguna razón esta es la segunda vez que durante la presente temporada se anuncia la Sinfonía No.0 pero se cambia por diversas razones, desconozco el motivo del cambio en este octavo concierto, la verdad es que tocar a Bruckner representa un verdadero desgaste físico además de un gran cansancio mental por la concentración que exige de los intérpretes, así que el programa se cambió en su totalidad, y finalmente se interpretó la Sinfonía No.2 en do menor, WAB 102 de Bruckner, cuya duración es de poco más de una hora.
Lo que me parece inconcebible, es que ya era jueves 14 de marzo, es decir, un día antes de la realización del concierto, y el personal administrativo de la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes, no sé si el gerente, Fernando Pérez, o la jefa o coordinadora de personal, Concepción Ramírez, no sé de verdad quién, pero seguían publicando en las redes sociales el programa originalmente anunciado, esto es imperdonable, porque evidentemente la orquesta tenía ensayando toda la semana la Sinfonía No.2 de Bruckner y al parecer los administrativos de la OSA nunca se dieron cuenta del cambio, tristemente así trabaja nuestra amada Sinfónica, con personal administrativo que no está a la altura de las exigencias de una orquesta de primer nivel como es la nuestra.
El motivo de programar obras del compositor austríaco Anton Bruckner es con el fin de celebrar el bicentenario de su nacimiento que en el mundo de la música lo conocemos como El Trovador de Dios, seguramente por el hecho de que dedicaba su música: “a toda la gloria de Dios”, escribió nueve monumentales sinfonías, además de otras dos que están al margen de este generoso corpus sinfónico, estas dos son la Sinfonía de Estudio, o Sinfonía en fa menor, que es en realidad un ejercicio de composición elaborado con la supervisión de Otto Kitzler, y la Sinfonía en re menor que es la que identificamos como la Sinfonía 0.
El Teatro Aguascalientes registró una entrada débil, por un lado, lo entiendo, Bruckner, no obstante ser uno de los compositores más vigorosos en su lenguaje musical, no es exactamente un músico “taquillero”, si se me permite la expresión, pero por otro lado también entiendo que es imposible que el teatro tenga buenas entradas si la difusión de los conciertos es prácticamente nula. Lo he comentado varias veces en este y otros foros, es necesario acudir a los medios de comunicación, recuerdo que el ingeniero Salvador Meza que fue gerente de la OSA durante seis años y que conoce perfectamente bien el oficio, además, claro, de tener un inmenso amor por nuestra Sinfónica y ser un melómano empedernido, tenía cada semana seis o siete entrevistas en diferentes medios, además de que también es necesario regresar a las ruedas de prensa que se hacían cada jueves previo al concierto en donde los medios tenían la oportunidad de entrevistar al director titular o huésped, depende sea el caso, al solista o solistas y conocer pormenores del concierto. En el caso de Bruckner, por ejemplo, sabemos que es un compositor cuya inseguridad en su trabajo lo llevaba a hacer constantes revisiones de sus obras, por lo que hay dos o tres versiones diferentes de cada una de sus sinfonías, en el caso de la Sinfonía No.2 que escuchamos este pasado viernes 15 de marzo, tenemos por lo menos cuatro versiones diferentes y nos encantaría saber cuál de ellas eligió el maestro Revueltas para presentarla en este octavo concierto.
Por otro lado, a juzgar por lo que vi en este concierto, el maestro Revueltas se limitó a hacer una lectura puntual de la sinfonía, más que una interpretación, con todo el compromiso que esto representa. Hablamos de una obra profundamente mística, espiritual, con un adagio, segundo movimiento, que debería conmovernos hasta las lágrimas, un movimiento profundo y muy intenso, y sólo escuché una lectura exacta, pero fría.
Para el noveno concierto, y con el que se cierra la temporada, escucharemos, si no hay cambios, Ferial, Divertimento Sinfónico de Manuel María Ponce, el Concierto para guitarra de Villa-Lobos, y la Sinfonía No.3, Op.44 en la menor de Sergei Rachmaninov, con la participación del maestro David García como solista en el concierto de Heitor Villa-Lobos y la batuta del maestro Román Revueltas. Nos vemos este viernes 22 de marzo a las 20:30 horas, espero que no haya retrasos, en el Teatro Aguascalientes.
