En cada dribbling, triple y entrada a canasta, Jaime Jáquez Jr., exestrella de UCLA y actual escolta/alero de Miami Heat, lleva consigo más que talento deportivo: confirma el legado y el orgullo de la comunidad mexico‑americana.
Nacido el 18 de febrero de 2001 en Irvine, California, Jaime creció en Camarillo junto a sus hermanos Gabriela y Marcos. Su padre, de Guadalajara, y su madre, de ascendencia noruega, impulsaron a los hermanos a conocer y respetar sus raíces. “Soy mitad noruego, mitad mexicano… Norwexicano o Mexiwegian”, bromea Jáquez entre risas.
Desde muy joven, los Jáquez disfrutaron de visitas frecuentes a México —a Zapotlanejo, Jalisco— para abrazar a su familia extendida y reforzar el vínculo cultura. En UCLA, Jaime ya era una cara visible para el talento latino; en 2019, jugó con México en los Juegos Panamericanos en Lima como ciudadano dual.
Llegada a la NBA e impacto cultural
- En 2023, Miami lo seleccionó en la primera ronda del Draft (#18), convirtiéndose en el mexicano-estadounidense mejor posicionado en la historia del draft.
- En su temporada de novato obtuvo los premios de Rookie del Mes (oct–dic) y formó parte del All‑Rookie First Team.
- Durante el All‑Star Weekend, participó en el Rising Stars y en el concurso de clavadas; usó una camiseta en español y sobre el tablero se proyectó la bandera mexicana y nombres de sus antecesores deportistas. Como él mismo lo comentó: “Todo es para honrar a los que vinieron antes”.
Orgullo y representación
- Entre su comunidad, Jáquez es considerado un modelo a seguir. Padres y jóvenes latinos lo aclaman después de los partidos: “Go Mexico”, “we’re Mexican too… We really appreciate you”
- Miami celebró su conexión con la cultura latina, desde altas ventas en eventos promocionales hasta conversaciones en español con fanáticos y chóferes que no hablan inglés .
- Jáquez mantiene vivas las tradiciones: le encantan los tamales en Navidad, escucha a Bad Bunny y Peso Pluma y canta “Suavemente”; además, está aprendiendo español para comunicarse mejor con su comunidad.
Próximos desafíos
Con 24 años y una versatilidad que lo hace valioso en defensa y ataque, Jáquez busca consolidarse en Miami después de una primera temporada sólida . Además, entre sus aspiraciones figura sumar a su carrera una representación oficial internacional: aún debate entre México y Estados Unidos .
“Aquí no solo juego por mí o por mi equipo, sino por mi gente,” reflexiona Jáquez, consciente de su impacto en una generación que, gracias a él, ya no ve barreras para brillar en la elite del deporte estadounidense.
Jaquez está construyendo una narrativa poderosa: la de un joven mexico‑americano que no solo juega en la NBA, sino que eleva la visibilidad de su cultura, representa el esfuerzo familiar y abre un camino más amplio para quienes vienen después.
