- En solo dos semanas y media, el programa ha realizado 182 consultas médicas a domicilio, priorizando a adultos mayores en situación de vulnerabilidad
- Las visitas son realizadas por personal de enfermería capacitado y plenamente identificado, e incluyen atención médica, orientación nutricional y registro supervisado
Además del diagnóstico físico, el programa ha generado impactos emocionales positivos, brindando escucha, cercanía y dignidad a personas que, en muchos casos, se sentían olvidadas
Con el inicio formal de un programa nacional que lleva atención médica directamente a los hogares, en Aguascalientes se han realizado ya 182 consultas a domicilio en tan solo dos semanas y media. Aldo Ruíz Sánchez, promotor de esta política social, destacó que el programa avanza con paso firme, priorizando el bienestar de los adultos mayores y fortaleciendo el vínculo entre las instituciones y la ciudadanía.
Ruíz Sánchez explicó que las visitas son realizadas por personal de enfermería plenamente identificado y con el equipo necesario para atender a las personas en sus propios hogares: “Las enfermeras ya están ahí, con su maleta, sus insumos, su gafete. El proceso es muy claro: la persona firma tres consentimientos para autorizar la visita, la consulta y el registro fotográfico que nos permite supervisar la atención”, señaló.
El funcionario subrayó la diversidad de realidades que han encontrado en campo: desde adultos mayores en situación de abandono hasta familias que cuidan con esmero a sus seres queridos: “Hay casos muy tristes, pero también otros en los que la familia está presente, atenta, pendiente de cada detalle. Eso también hay que decirlo”, afirmó.
En la mayoría de las visitas, agregó, al momento de llegar ya hay algún familiar presente: hijos, hijas, esposos o cuidadores: “Eso nos habla de una sociedad que sigue valorando a sus mayores y que responde con cariño y responsabilidad”, comentó.
Entre los hallazgos más importantes del programa, destaca el diagnóstico de condiciones de salud frecuentes en este sector de la población. Según los registros actuales, el 30.37 % de los adultos mayores atendidos presenta hipertensión, lo que la convierte en el principal padecimiento, seguida por discapacidades asociadas al envejecimiento (29.54 %) y casos con múltiples patologías (27.37 %). La diabetes, en contraste, ha disminuido su incidencia, lo cual Ruíz Sánchez atribuyó a campañas de concientización tras la pandemia.
“Después del COVID-19, hubo una toma de conciencia sobre lo que comemos. La gente empezó a identificar mejor los productos, saber qué es lo que se está comprando. Eso ha impactado positivamente”, expresó. Sin embargo, reconoció que comer sano sigue siendo un privilegio para muchas personas y por eso el programa también incluye orientación nutricional con alternativas económicas y accesibles.
Además de la atención médica, el programa ha generado un efecto emocional positivo: “Muchos adultos mayores se sienten más tranquilos al ser escuchados, al sentirse atendidos. Al principio, algunos rechazaban la visita. Ahora nos dicen: ‘Venga, por favor’. Eso también transforma”, concluyó Ruíz Sánchez.




