Blindaje de todos los días
Mientras en Zacatecas el operativo de seguridad se enciende como respuesta puntual a eventos violentos, en Aguascalientes el enfoque, según el secretario de Seguridad Pública, Antonio Martínez Romo, es muy distinto: aquí, el blindaje no es reactivo, es permanente. No se trata de salir corriendo tras cada hecho delictivo, sino de construir una barrera cotidiana de vigilancia y coordinación.
Martínez Romo afirma que en nuestra entidad no se improvisa con la seguridad. Se trabaja “todos los días”, en coordinación constante con corporaciones locales y federales, especialmente en los límites con Zacatecas y Jalisco. El secretario se ha mostrado respetuoso de los esquemas de sus vecinos, pero también ha enfatizado en que la seguridad no debe ser episódica ni mediática.
Lo cierto es que la estrategia de blindaje debe sostenerse más allá del discurso, porque el riesgo es latente. Y aunque aún falta camino por recorrer, la constancia y la prevención marcan la diferencia entre una reacción tardía y una protección real.
Cuando el Fondo ya no es el enemigo
La Cuarta Transformación encontró en el Fondo Monetario Internacional un adversario retórico conveniente. Pero cuando el FMI pasa de advertir una posible recesión a reconocer el crecimiento económico de México, el discurso cambia: ahora también es parte del orgullo nacional. Nora Ruvalcaba no tardó en subrayar que el avance del país -1.3% anualizado- se debe a factores como el aumento salarial, los programas sociales y una economía que, pese a los augurios, sigue dando señales positivas. Ojalá el reconocimiento internacional no se convierta después en un nuevo argumento de negación si los indicadores se revierten.
A MIAA le falta barrio, mucho barrio
Una promesa de campaña se fue reformulando sobre la marcha. Lo que inició como un grito unánime de “vamos a correr a CAASA” terminó en una salida accidentada de Veolia y una gestión forzada del servicio por parte del municipio. El Modelo Integral de Aguas de Aguascalientes (MIAA) nació sin la planeación adecuada y con una carga administrativa repleta de cuotas partidistas, compromisos políticos y regidores de todas las corrientes metiendo mano.
El personal operativo y quienes dan la cara en cajas son los que enfrentan la presión real. Mientras tanto, las calles perforadas sin tapar son la prueba más visible de una ejecución atropellada. Sí se repara, pero no se concluye. Es una queja diaria en medios locales. A quien encabeza el organismo le vendría bien salir a las calles y contrastar los partes que le entregan sus aliados políticos. Como diría la banda: le falta barrio.
Pero lo paseado quién se los quita
Mucho escándalo con los viajes, poco con los resultados. Tan fácil que era explicar qué se hizo, a qué se fue y por qué se eligió a quienes se eligió. Pero las y los regidores que se fueron a París prefirieron enviar al alcalde a justificar lo que claramente era injustificable. A varios les da miedo salir a medios, pero eso suele pasar cuando lo que se busca es evitar ser auditado o criticado.
Calma política
Morena entra en una etapa de renovación. Surgen nuevas caras y se reposicionan figuras como Arturo Ávila -con un estilo que no agrada a todos, pero que ha ganado espacio a nivel nacional- y Nora Ruvalcaba, quien mantiene su lucha en lo local. Aldo Ruiz, por su parte, sigue cumpliendo con la encomienda federal. El verdadero reto será si este grupo logra consolidar cuadros, posicionar liderazgos y, por supuesto, repartirse el pastel sin que se les indigeste.
¿Y las autoridades municipales?
Aplaudimos la detención de personas vinculadas al presunto campamento delictivo, pero surgen preguntas legítimas que no pueden quedarse sin respuesta. ¿A quién pertenecía el predio donde se asentaron? ¿Cuánto tiempo llevaban operando ahí? ¿Ninguna autoridad municipal se percató de su presencia? ¿Ya no existen patrullajes preventivos ni recorridos de reconocimiento por parte de las distintas corporaciones?
La ciudadanía merece saber si se trató de omisión, negligencia o, peor aún, complicidad. Estas y muchas otras dudas deben ser atendidas no solo por la Fiscalía General de la República, sino también por el propio municipio de Aguascalientes. Lo que está en juego es la confianza pública y el derecho a vivir en un entorno seguro.
Más aranceles
Mientras los aranceles estadounidenses siguen en suspenso, el secretario Esaú Garza insiste en que todo va bien. Que hay contacto con Economía federal, que hay buena relación con Estados Unidos, y que si se aplican, no será tan grave… para nosotros. Al parecer, allá les va a doler más. Total, lo importante ahora es diversificarnos y, de paso, consumir local. Como si con eso bastara para sostener la cadena automotriz global. Pero bueno, ánimo no falta.
Sobre la jornada violenta
En paralelo, la gobernadora Teresa Jiménez abordó la jornada violenta del sábado pasado con una nueva frase de batalla: “Si se la hacen a uno, nos la hacen a todos”. Ya no se trata de pagarla, sino de tomársela personal. Y suena fuerte. También dijo que prefiere un día así a vivir un año entero junto a “esa gente” -la expresión quedó a la interpretación, pero se entendió el coraje-.
Y aunque el discurso apunta al combate a la delincuencia con prevención, con más escuelas, deporte y tecnología, la sensación en las calles todavía no se despeja del todo. Por suerte, en su reciente gira, Jiménez habló con varios empresarios japoneses y podrían venirse más inversiones. Porque si algo no falta en esta administración es optimismo.
Así que entre balas, bits y bots nipones, seguimos avanzando. Como sea. Con fe, con frases y con convenios. A ver si esta vez también nos sale.




