Joakim Agustín Soria Ramos, nacido el 18 de mayo de 1984 en Monclova, Coahuila, México, sigue siendo una figura destacada del béisbol por su consistencia como cerrador derecho en las Grandes Ligas, reconocido por su apodo “The Mexicutioner”.
Raíces y primeros pasos
Desde niño, Soria mostró pasión por el béisbol. A la edad de cinco años ya participaba en torneos infantiles, respaldado por una familia que lo impulsó a perseguir su sueño. Su padre fue manager de su equipo juvenil, y su hermano mayor fue una inspiración para sus primeros pasos en el deporte.
Se formó profesionalmente en México. Jugó con los Diablos Rojos del México en la Liga Mexicana de Béisbol (LMB) y también con los Yaquis de Ciudad Obregón en la Liga Mexicana del Pacífico (LMP).
Ascenso en Grandes Ligas
Soria fue seleccionado en el draft de Regla 5 por los Kansas City Royals procedente de los Padres de San Diego en 2006. Debutó con los Royals en 2007, mostrando rápidamente su capacidad para cerrar juegos. Esa primera temporada registró 17 salvamentos y una efectividad de 2.48.
En 2008 fue su año de mayor notoriedad hasta ese momento: salvó 41 juegos de 44 oportunidades y tuvo una efectividad de 1.63. Fue seleccionado al Juego de Estrellas, siendo ese año el único representante de los Royals.
Logros y trayectoria posterior
- En 2010, Soria alcanzó los 100 salvamentos en las Grandes Ligas, marcando un hito a una edad en que pocos cerradores lo logran.
- Ha jugado para varios equipos: tras su largo periodo con los Royals, firmó con los Rangers de Texas, pasó por Detroit Tigers, Pittsburgh Pirates, regresó a Kansas City y tuvo estancias en otros clubes.
- Fue parte de la Selección Mexicana para el Clásico Mundial de Béisbol de 2009.
Legado y aportes
Joakim Soria se ha consolidado como uno de los lanzadores mexicanos más reconocidos en la historia reciente del béisbol. Su consistencia en el rol de cerrador, su capacidad de mantenerse competitivo a lo largo de los años, y su identificación con México le han ganado respeto tanto en su país como entre fans internacionales.
Aunque los últimos años han incluido desafíos —como lesiones y cambios frecuentes de equipo—, su nombre sigue presente en la conversación de los grandes cerradores latinoamericanos.




