El diputado Adán Valdivia López advirtió que México avanza hacia un modelo centralista que, a su juicio, pone en riesgo la propiedad privada y replica prácticas similares a Venezuela
Criticó la nueva Ley Nacional de Aguas al considerar que castiga por igual a productores cumplidos y a quienes incumplen, lo que calificó como una injusticia y un “atraco” al campo
Señaló un deterioro en economía, seguridad y apoyos agrícolas, y afirmó que el gobierno busca un control absoluto mientras productores defienden infraestructura construida por generaciones
México avanza hacia un modelo centralista que pondría en riesgo la propiedad privada, advirtió el legislador Adán Valdivia López, quien aseguró que el país “va que vuela para convertirse en Venezuela” ante las decisiones del gobierno federal.
El diputado sostuvo que la administración actual continúa confrontando a diversos sectores y generando afectaciones directas. En este sentido, calificó como “un atraco” lo que ocurre con los productores agrícolas y cuestionó que, en lugar de aplicar la ley, se responsabilice a actores específicos sin atender el problema de fondo.
Afirmó que la nueva Ley Nacional de Aguas representa una injusticia, pues castiga por igual a quienes cumplen y a quienes no. “Es como si alguien en la escuela se porta mal y lo tuvieran que pagar todos; en pocas palabras, es un robo”, expresó. Añadió que el gobierno parte de la premisa de que la ciudadanía obtiene sus recursos de manera indebida, lo cual, dijo, no corresponde a la realidad.
Valdivia López insistió en que existe una intención ideológica de control absoluto, lo que consideró un retroceso para el país. Recordó que la administración anterior vendió la idea de ser la solución, pero “querían destruir y lo están logrando”, aseguró.
Asimismo, comentó que en distintos indicadores nacionales -entre ellos economía, seguridad y apoyos al campo- se registra un deterioro constante. “Vamos hacia un comunismo y a un centralismo donde prácticamente el Estado es dueño de todo”, advirtió.
El legislador también reconoció el esfuerzo de los productores que hoy defienden lo que han construido durante generaciones. Puso como ejemplo a familias en Calvillo que edificaron infraestructura agrícola con su propio trabajo, como la presa Peña Blanca, a la cual, dijo, se le recortó un volumen importante de agua en las nuevas disposiciones.
Finalmente, reiteró que la tendencia del país apunta hacia un modelo similar al venezolano, donde la propiedad privada se diluye. “Nadie está en contra de los nuevos acaparadores; lo que deben hacer es aplicar la ley”, concluyó.




