Borrón y cuenta nueva
Muy lento en cuadrar las cuentas
“Seguimos considerando que los rumores son meros síntomas de la suspicacia con la que los mexicanos perciben al presidente, más que avisos concretos. Sin embargo, son lo suficientemente consistentes como para sustentar la especulación que expongo en este informe con el fin de definir un escenario posible y sus implicaciones para el gobierno de Estados Unidos”, explicaba Joseph John Jova (embajador de Estados Unidos en México de 1973 al 77) cuando informaba que Luis Echeverría podría “estar conspirando para asesinar al presidente electo José López Portillo para poder extender su periodo en el poder”; narra la nota de Blanche Petrich basada en un cable de Wikileaks y publicada ayer en La Jornada.
Lo que llama la atención y subrayamos es que el diplomático justificaba la difusión del rumor a pesar de reconocer que era una “ejercicio de imaginación” porque reflejaba los síntomas de la suspicacia, en ese sentido Jova fue un adelantado al caracterizar en una sola frase el uso que la clase política le da a las redes sociales en apoyo de sus intereses.
Mientras muchos se quiebran la cabeza para generar un mensaje coherente que pueda ser transmitido a través de Twitter, Facebook o el correo electrónico y que genere una reflexión, lo que gana es el ataque mentecato, el nivel de humor más bajo, y lamentablemente, la clase política cae en la trampa, alienta como parte de su campaña le difusión de rumores, ataques, bromas de mal gusto. Incluso alientan el crecimiento de grupos agresivos creyendo que su violencia los posiciona mejor, y a eso llaman “estrategia de medios”.
Ahí están todos, y en este momento los panistas, rehenes de su ambición, los grupos de Antonio Martín del Campo y Felipe González González se lanzan piedran, tuits, lodo y correos injuriosos a todo lo que da. ¿Son responsables los aspirantes? Sí, no hay de otra, paguen o no, no sancionar públicamente los ataques los alienta. La salida no es jurar y perjurar que ya le dieron vuelta a la hoja, como está haciendo Jorge López Martín, quien así se lava las manos; tampoco en arrojar la piedra y agarrar el avión, como en el partido de enfrente hizo Óscar López Velarde.
Esa actitud agresiva no dio resultados, al menos no cuando se trata de puras fintas, ya lo comprobó el PRI con el buscapié de la supuesta demanda que Guadalupe Ortega Valdivia levantó contra Enrique Plancarte y quedó en… en nada.
El mismo rumbo de la acusación apantalladora está tomando la delegada de Sedesol, Norma Esparza, apurada por posicionarse como la interlocutora de los delegados ante Carlos Lozano, no le basta con promocionar como un logro partidista los programas de su dependencia, ahora resulta que se acaban de dar cuenta que algunos vivales hicieron guardadito con el programa Tu Casa, mismo que fue distribuido a medias, quizá para el usufructo de temporada electoral, un anuncio que tiene la clara intención de reflejar que ahora ya no se va a hacer así; lo que está muy bien, pero, no se trata de borrón y cuenta nueva, ¿no? Si los recursos se desviaron, si se compró material y no se repartió, si… lo que sea, debe haber culpables, no basta con tapar el pozo. Ay, capital político, los desfiguros que se hacen en tu nombre.
Audita al auditor. Nomás para dar continuidad a la información que le hemos venido presentando en la columna. Este año la Auditoría Superior de la Federación contempla como parte de su programa de trabajo realizar cientos de auditorías en los estados, para así seguir la pista a los recursos de origen federal. Y cuando decimos cientos, nos referimos a que se efectuarán más de 650 ejercicios para revisar el manejo de 500 mil 717 millones de pesos de origen federal, que recibieron a través de 14 fondos y cuatro programas y convenios.
El Plan de Auditorías de la ASF, contempla para Aguascalientes realizar 16 revisiones, además de ser parte de la fiscalización de la Cuenta Pública 2012, este organismo emplea la información recabada para asignar recursos a sus similares en los estados, el Órgano Superior de Fiscalización aquí en la entidad, a cargo de Arturo Solano López, quien pronto será llamado a cuentas por el indiscriminado, pero sobre todo inexplicable recorte en el organismo a su cargo.
La del estribo. Solano López, le hemos comentado, se arrojó con todo en contra de su antecesor en el cargo, que porque Eduardo Ramírez era muy lento en cuadrar las cuentas… Bueno, la Auditoría Superior de la Federación, para este año, entregó 1 millón de pesos menos al auditor de Aguascalientes, y esos recursos (PROFIS le llaman por el Programa para la Fiscalización del Gasto Federalizado) se relacionan con el desempeño de cada organismo. De nuevo, bajo esa lógica y con ese presupuesto, ¿a qué responden los recortes?
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