- El Verde Ecologista, en su visita al predio, encontró un alto grado de contaminación y tala ilegal
- Lo nombraron área natural protegida y dijeron que se expropiará, pero nunca dijeron con qué dinero
En días pasados los diputados del Verde Ecologista realizaron una gira a lo largo del área ecológica La Pona, junto con representantes de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (Proespa) y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), en donde se observaron varias situaciones graves, según lo afirmó Sergio Augusto López Ramírez.
La primera fue que es un predio altamente contaminado, con casi un 40 por ciento de tala ilegal y deforestación, “consideramos que es urgente atender esta situación”, sin embargo el problema aquí es la falta de recursos económicos.
Platican los dueños que el predio lo compraron con un valor de 9 millones de dólares hace casi 20 años, por lo que actualmente tendría un costo aproximado a los 200 millones de pesos, “esto, más aparte un plan para descontaminarlo, uno para restaurarlo y otro para mantenerlo”.
Ante estos número tan altos, el legislador manifestó que es una situación que no sólo estaría en manos de la Presidencia Municipal, sino también del Estado, y de la propia Federación, ya que como diputado habrá de gestionar ante la Comisión de Medio Ambiente del Senado, donde ellos fueron los que aprobaron un acuerdo para decir que se convertiría en un área natural protegida y que se expropiara, pero nunca dijeron con qué dinero.
La postura de los dueños desde el inicio fue que si se expropiaba, se les pagara un alto monto o se le entregara un terreno con valor parecido al predio, pero “esto ya está en manos de la próxima Presidencia”, ya que la actual se encuentra en los últimos meses de su administración, por lo tanto ya no cuenta con los recursos suficientes para realizarlo.
Para López Ramírez, si el tema de La Pona no se atiende, de ser un pulmón, zona de recarga y un ecosistema de flora y fauna, se convertirá en un futuro desierto y área de mucha contaminación.
Asimismo, durante su visita, vecinos de alrededor señalaron las “desagradables fiestas” que organizan algunos vándalos, tales como orgías, borracheras, y demás desmanes, “por ser una zona privada no pueden ingresar al predio los elementos de seguridad pública”, además de no tener la vigilancia interna suficiente.
“Por todos lados, La Pona es un problema grave”. Desde el punto de vista ambiental, lo ideal sería una expropiación, aunque en su calidad de diputado no puede hacer más, ya que la palabra la tienen los ejecutivos; una opción sería que de manera tripartita pudiera rescatarse este importe pulmón aguascalentense.
Por el momento no se ha dialogado con el gobernador, incluso públicamente ha expresado que no tiene contemplado el tema de rescate a La Pona, sin embargo cercioró que ojalá pronto puedan tener reunión con él y platicar el tema para determinar los mecanismos correspondientes.
Sería entre ésta y la siguiente semana, a más tardar, cuando la comisión ambiental haría el planteamiento tanto al gobernador como a la alcaldesa, aunque en este último caso sería sólo para mantenerla informada, ya que como se mencionó anteriormente, sería difícil que esta administración concretara alguna acción.
“Hay varios escenarios que ahora dependen directamente del gobernador”, por lo que se deberá explorar todo el caso, ya que si existe voluntad política, las variantes que tiene este tema podrán ser vencidos.
Foto: Gerardo González




