Cuando un familiar le pierde la pista a su ser querido que migró como ilegal hacia Estados Unidos cada minuto que pasa se convierte en una espera que no termina y se complica al enfrentarse a las posibilidades de las oficinas de atención al migrante que se ven acotadas por las complicaciones en los consulados y las misma Secretaría de Relaciones Exteriores.
David Alejandro Hernández de la Cruz se fue a Estados Unidos y por más de tres meses su madre, Adela de la Cruz, le perdió la pista. Sabían que estaba detenido, pero como lo cambiaron de prisión perdieron contacto con él. Ante esta situación, su madre le pidió apoyo a la presidenta de la Asociación de Migrantes Organizados (AMOR), Xicoténcatl Cardona para que le ayudara en la localización del joven.
Cardona acudió de manera inmediata a la Oficina de Atención al Migrante y a su consideración no recibió la atención adecuada, pues sin realizar trámite alguno le dijeron que la única solución era esperar. “Les pregunté de qué manera podíamos hacer para localizar al chico y lo único que me respondieron fue que tenía que esperar porque hay condados que son muy duros y llegan incluso a darles entre dos y cinco años de prisión”, refirió.
Ante la incapacidad que demostraron las autoridades en esta oficina, acudieron a la delegación de la SRE y la respuesta fue similar.
A este respecto, Guillermo González Zárate, encargado de la Oficina de Atención al Migrante, señaló que él le había pedido a Xicoténcatl que dijera a los familiares que acudiera directamente con ellos para realizar el trámite, pues los consulados son muy confidenciales y no aceptan intermediarios para los mismos.
“Seguramente le dijeron que tenía que esperar por la situación de su familiar migrante, todos los casos son muy similares y saben que pueden pasar de dos a tres meses en espera de ser deportado y eso si no tiene algún antecedente”.
El consulado se tarda en responder, generalmente lo hace hasta que tiene algo de información concisa, además de que dependen de muchos factores, en dónde fue detenido, si es la primera vez. Señaló González, que la espera no es sólo por hacerlos esperar. Después de intentarlo por la vía oficial, Xicoténcatl Cardona acudió a los contactos que ellos tienen en el Paso, Texas; pues pertenecen a una red de asociaciones migrantes y fueron ellos quienes los apoyaron a localizar al joven, a liberarlo y regresar con su familia.
Esta no es la primera vez que el activista de AMOR se acerca a la OAM, sino que en ocasiones anteriores ha ido a invitarlos a las reuniones que ellos organizan, pero hasta la fecha ni han asistido, ni ha obtenido respuesta alguna.
La intención no es ver quién hace mejor trabajo, sino más bien trabajar juntos, coordinar esfuerzos, ellos como migrantes tienen contactos con otras organizaciones en Estados Unidos, que trabajan con el tema de derechos humanos y conocen de cerca la situación, el gobierno tiene recursos económicos y si ambos elementos se combinan se podría hacer un trabajo muy interesante.
El trámite que tuvieron que hacer para que liberaran al joven fue negociar la firma de la deportación por la conmutación de la pena, que según Cardona es algo muy común en el país del norte, “las personas que trabajan con tarjetas verdes cometen un delito federal, pero todo el mundo lo hace y el gobierno se hace de la vista gorda cuando necesita mano de obra, pero cuando hay sobrepoblación comienza con las deportaciones masivas”.
Guillermo González agregó que la OAM se contacta en primera instancia con la delegación de Relaciones Exteriores como un procedimiento de protocolo porque su vínculo hacia Estados Unidos es a través de los consulados, luego le piden al familiar que acuda directamente a la SRE a dar de alta el asunto para que inmediatamente le informen al consulado donde creen que está extraviado el joven.
La oficina estatal por su cuenta también envía un correo al consulado para hacerles la petición de información y quedar en espera de una respuesta, por su parte ellos de acuerdo a su experiencia, le explican al solicitante cuál puede ser la situación de su familiar y le piden que espere.
La OAM recibe en un mes entre 6 y 8 solicitudes de este tipo, al menos la mitad se resuelve de manera favorable y en la mayoría delos casos son jóvenes que fueron detenidos por su calidad de ilegal y se está a la espera de ser deportados.
