La mayoría de estudiantes y maestros vivimos la Universidad por intuición. En tanto ignoremos la razón de ser de este organismo y el papel fundamental que cada uno de nosotros jugamos en él, la Universidad no existe en plenitud.
Es por eso que, para que la Universidad esté construida sobre
cimiento firme, es imperioso que su definición -principios, medios y
fines- surja de un consenso -de preferencia mundial- entre sus únicos
elementos insustituibles, que son sus estudiantes y su personal
académico; sólo así, estando cada uno consciente de su profundo
contenido y trascendente misión, se garantizará el desempeño en paz y
libertad que la institución requiere para ser plena.
7. URGE UNA REFORMA UNIVERSITARIA MUNDIAL
No se trata de regresar a ninguno de los cuatro tipos de universidad
mencionados en un principio para plantear la reforma universitaria. Sin
embargo, debemos empezar por aprovechar sus experiencias conservando lo
bueno y desechando lo malo de cada uno, para luego imprimir el sello de
la que tiene que participar en la transición entre la revolución
industrial que agoniza y la revolución cibernética en gestación. Grave
responsabilidad.
Debemos aprovechar el amor por el conocimiento de la Universidad
Medieval, pero evitar su dogmatismo esterilizante; aprovechar la
incorporación del conocimiento científico de la Universidad
Napoleónica, pero evitar su pragmatismo burgués y su arraigada pasión
por los títulos, que no garantizan la posesión del conocimiento y mucho
menos del discernimiento crítico; aprovechar la unidad de la enseñanza
y la investigación de la Universidad Alemana, pero evitar su idealismo
extremo; y aprovechar la actitud globalizadora de la Universidad
Neoliberal, pero evitar su deleznable tecnocracia e idolatría por el
dinero que asfixia la capacidad axiológica del ser humano.
Para todo esto se requiere una reforma no nacional ni regional, sino
mundial. Y para ello es imprescindible empezar por construir una
definición a la altura de los tiempos.
8. PROPUESTA
En 1918 tuvo lugar en Córdoba, Argentina, un acontecimiento del que
es imperativo recuperar la memoria histórica: la Reforma Universitaria
Latinoamericana, modelo que bien podría sumarse a los cuatro
mencionados en el esquema inicial.
En 1968 se dio el primer capítulo del movimiento estudiantil
mundial, que no por desarticulado deja de ser un parteaguas histórico
en proceso de desarrollo.
Dentro de nueve años se cumplirá un siglo de la primera y cincuenta años del segundo.
A este respecto, proponemos que la Universidad Nacional Autónoma de
México convoque a una reunión de las universidades del mundo en el año
2018, para definir cómo deberá ser la universidad del futuro.
Sometemos a la consideración de nuestra Facultad la viabilidad de
presentar esta propuesta al Dr. José Narro Robles, rector de la UNAM,
pues tanto la celebración del centenario de nuestra Alma Máter, como el
II Encuentro Internacional de Rectores Universia 2010, serían foros
oportunos y adecuados para anunciarlo.
En cualquier caso, nos permitimos presentar, en el noveno y último
punto de esta ponencia, una recopilación organizada de conceptos de uso
común en la doctrina universitaria, que podrían ser de utilidad para
iniciar las deliberaciones que conduzcan a la definición de referencia:
9. CONCEPTOS BÁSICOS PARA UNA DEFINICIÓN DE UNIVERSIDAD
9.1 Universidad es la comunidad de estudiantes y maestros
constituida en un organismo público descentralizado del Estado, con
personalidad jurídica y patrimonio propio cuya fuente es el subsidio
estatal suficiente y oportuno,
9.2 que autogobernada en plena libertad
9.3 y paritariamente por sus estudiantes y maestros,
9.4 mediante la unidad orgánica del saber se consagra a la búsqueda de la verdad
9.5 y a la transmisión gratuita del conocimiento
9.6 mediante la enseñanza (empezando por la cosmovisión que el
bachillerato ofrece al forjar seres humanos integrales, seguido de las
escuelas, facultades e institutos donde se preparan los respectivos
profesionales, maestros e investigadores con la vocación de servicio
que requiere la sociedad) y la extensión a la comunidad,
9.7 así como a recopilar la memoria de la cultura y contribuir a su actualización y perfeccionamiento.
9.8 En esa labor se considerarán por igual -con respeto irrestricto
a la libertad de cátedra y con total autonomía a toda influencia
mercantil, religiosa y de política extrauniversitaria- las diversas
corrientes de pensamiento pero no se recomendará ninguna, porque esa
elección corresponde única y exclusivamente al sujeto de la enseñanza.
9.9 Todo lo anterior regido bajo el imperio de los más altos valores éticos y estéticos
9.10 y con el fin último de iluminar por todos los medios al alcance de la consciencia crítica
9.11 el camino de la paz, la libertad y la justicia en armonía con la naturaleza.
“Por la unidad en la diversidad” n
netz@exalumno.unam.mx
