- Por una equidad entre su aumento y el de insumos básicos
- Van a la baja los registros de las tiendas en la ciudad
Ante el ingreso de nuevos gobernantes, particularmente en el gobierno del estado y la presidencia municipal de Aguascalientes, el presidente de los abarroteros, Antonio Hernández, les pidió que en el cumplimiento de sus promesas, este incluida la de velar por un aumento digno para el salario mínimo de los trabajadores, debido a que esta es su principal fuente para obtener mayor numero de ingresos en las tiendas comerciales.
“Pediríamos la recuperación del salario mínimo, que son nuestros clientes principales, mientras el asalariado tenga circulante, tenga poder adquisitivo, definitivamente para nosotros va a cambiar la situación, van a ir hacia arriba las ventas”, señalando que actualmente el problema principal es la falta de capital para la compra de insumos en las tiendas de abarrotes.
Insistió en que el trabajador recibe un aumento anual que no es equiparable con todos los incrementos presentados en los insumos de consumo básicos, ejemplificando en que el salario aumenta un 4 por ciento perolas mercancías llegan a sumar hasta un 20 por ciento; “nunca se va encontrar un equilibrio mientras el sistema de trabajo siga igual”.
Antonio Hernández manifestó su preocupación por la falta de empleo en la entidad, asegurando que las estadísticas manejadas por los gobiernos no son valoradas de acuerdo a su significado, subrayando que en muchas ocasiones son más los eventuales que los permanentes, lo que poco abona al desarrollo sostenido de la económica local.
El rubro de los abarrotes genera pocos empleos, la gran mayoría son espacios que las familias dan la posibilidad de emplear s sus propios parientes, pero no es un rubro característico de crecimiento en plazas laborales, sin embargo, el representante de los pequeños comerciantes argumentó que hace falta mayor oportunidad para que la gente se integre a las actividades productivas bajo salarios dignos.
No obstante, los registros de apertura en tiendas de abarrotes han sido mínimos, aunque el conteo se hace hasta finales del año, la percepción del presidente es que son mucho más los negocios que han tenido que cerrar por diversas causas ante los que prefieren arriesgarse e invertir en un momento que a su criterio no ha sido tan benefactor como halagan las propias autoridades estatales.
“Abren y desgraciadamente eran tres, cuatro o seis meses se desengañan de que no es lo que ellos imaginaban”, además de que al ver la competencia que existe con los auto servicios o las cadenas comerciales, comienzan con una desilusión lacerante tanto para el proyecto de servicio, como en los indicadores de ventas.
Lo problemas que enfrentan los abarroteros en el escenario económico se reúnen en la presencia fuerte de las cadenas comerciales dedicadas a la venta de los mismos productos, así como la falta de dinero en sus clientes y le proliferación de espacios como las tiendas de autoservicios.
