Las ligas y copas de clubes se agotaron, júbilo para el campeón y lágrima para los descendidos… al menos en los países en que sus ligas juegan ante ciertas leyes de la lógica, no en el México del sí se puede, del todo es posible… hasta no descender cuando fuiste el peor y el dinero sume más que las victorias.
Sin quejas, sólo comento, que todo fue dentro de la normatividad.
Pero gracias a dios el calendario futbolero es más que clubes y el Tri del Chepo está en el momento decisivo en la curva de rendimientos. Es fácil, en 20 días tienen que dar mejores resultados para comenzar a preparar el terreno mundialista.
La Selección en el papel la tiene fácil; en mes y medio el Chepo dirigirá más de 10 partidos entre eliminatorias, Copa Confederaciones y Copa Oro; gran rotación de jugadores le dará la oportunidad de visoria ante nuevos talentos de selección en muy poco tiempo. Lo suficiente para que las estrategias tengan un año para fraguarse y estén maduras para Brasil 2014.
Nigeria, sólo sparring
México cumplió su sexto empate en forma consecutiva, se le ha olvidado ganar así como se ha olvidado qué es perder. El partido en contra de Nigeria demostró el orden que ha puesto de la Torre en los seleccionados, han entendido el juego y está rescatando el funcionamiento de las posiciones naturales de cada uno de ellos.
Salcido y Pablo Barrera dieron la salida y profundidad con la que nos gusta ver jugar al combinado, a pesar de la expulsión de Barrera, el conjunto siguió al mando de la pelota y me gustó verlo venir desde atrás, esta vez en desventaja.
Es cierto, falta la contundencia de Javier Hernández en los demás delanteros pero créanlo, poco hace falta para despertar el espíritu goleador del combinado azteca, y con esto la suma de a tres, sólo falta generar confianza y gracias a la pequeñez de nuestra confederación la eliminatoria servirá para eso.
Rumbo al Mundial
Tres empates, tres partidos, tres puntos tienen a México en crisis dentro del hexagonal final, quinto lugar sólo por encima de Jamaica.
Es el peor inicio de hexágonal final para México en eliminatorias mundialistas, pero aún no levanta alarmas, también es realidad que sólo se encuentra a dos puntos de Panamá que se posiciona por el momento en primer lugar, (sí Panamá).
Los tres partidos en esta semana marcarán el rumbo de decisiones y es la oportunidad perfecta de retomar credibilidad. México ha dejado escapar cuatro puntos en el Azteca contra Jamaica y Estados Unidos, mismos que podrá recuperar en sus dos juegos fuera de casa, el 4 de junio contra Jamaica intentando superar el 0-0 de febrero, con el Chicharito enrachado y tres días después contra Panamá.
Terminará la ronda de eliminatoria cerrando en casa en contra del combinado de Costa Rica, con la mira en la parte alta de la tabla y claridad para el regreso de los partidos eliminatorios, la primera y segunda semana de septiembre.
Copa Confederaciones
Además el equipo “A” del Chepo sigue en evolución ascendente, no deberán tener problemas para calificar y los tres partidos de eliminatoria previas a la Copa Confederaciones servirán para afinar los detalles necesarios que den a México la oportunidad de hacer un papel digno ante la prueba un año antes del Mundial.
Italia, Brasil y Japón parecen ser los contendientes perfectos para medir la calidad del equipo del Chepo, dejando atrás las ilusiones de volver a levantar esta copa, se deberán aprovechar estos tres partidos seguros para retomar la mentalidad ganadora y evaluar el comportamiento ante equipos que darán batalla de forma diferente.
Hasta el momento, la Selección nos ha tenido acostumbrados a verlos jugar con la pelota, a mandar en el terreno de juego, proponer, cansarse de fallar al frente y perder la concentración momentánea que cuesta goles atrás.
Copa Oro, los otros convocados
La otra Selección entrará en competencia en julio, los convocados tienen la oportunidad perfecta para demostrar que son aptos para vestir la vberde y no ser tomados como plato de segunda mesa.
Moisés Muñoz en la portería, pocas oportunidades tiene de quitarle el lugar a Jesús Corona o a Guillermo Ochoa, pero puede tomar el tercer puesto de Brasil y dejar fuera a Talavera.
La delantera puede tener la mejor pantalla y ser tomados como primera opción ante la falta de contundencia de Aldo de Nigris y Raúl Jiménez. Sobre todo Oribe Peralta, quien ya tiene la confianza de Chepo y que abandonó al primer equipo por cuestiones médicas.
Para Omar Bravo puede que sea su última oportunidad, ya que se reducen las esperanzas por edad de repetir en convocatoria mundialista. Marco Fabián y Rafael Márquez Lugo deberán esforzarse más, ya que Ulises Dávila tiene la ventaja de la experiencia creciente que está tomando en Europa. Queda Isaac el Conejito Brizuela que será una incógnita y creo poco tiempo tendrá para ser observado en Copa Oro.
Queda una expectación más en el defensa de moda del América con Layún, ante los procesos mediáticos que ha sido héroe y víctima se marca una tendencia a ser seguido y las puertas ante llegar al Mundial pueden quedar en esta copa de confederación que “no de nada” pero a ciertos jugadores aztecas pueden darle todo: su pase al Mundial.
Esperanzas de Toulon
No perdamos de vista este torneo, México defiende su trono y no olvidemos que fue la preparación final rumbo a la medalla dorada en Londres 2012.
Los jóvenes siguen dándonos satisfacciones y se traducen en medallas y trofeos, no sólo esperanzas. Toulon ha sido y seguirá siendo plataforma para que los clubes valoren y den oportunidad a sus jóvenes en el primer equipo, además de pantalla para los jugadores en el extranjero.




