Cada 11 de julio, desde 1987, se celebra el Día Mundial de Población, con el fin de llamar la atención sobre la urgencia y la importancia de las cuestiones sociodemográficas, en el marco del desarrollo de las naciones. En el 2014 el tema central para Naciones Unidas es la importancia de “Invertir en las y los jóvenes”, y garantizar que sean incluidos como grupo poblacional prioritario en la agenda de desarrollo más allá del 2015 (metas del milenio) fomentando la realización de sus derechos humanos, y el acceso efectivo a oportunidades educativas y laborales, a los servicios de salud y cobertura de seguridad social como a la mejor inversión posible para mejorar la vida de las generaciones actuales y futuras.
En la medida en que la Bioética ha evolucionado, se ha dado a la tarea de formular una agenda global para la humanidad. Desde sus principios podemos afirmar, que si no se garantizan las condiciones para la sustentabilidad generacional, los y las jóvenes son y serán altamente vulnerables a abandonar los estudios, a tener embarazos no planeados y a conformar familias disfuncionales; a vivir en un clima de violencia física, cultural, y estructural; y al mantenimiento de situaciones de pobreza y exclusión social.
Las estadísticas lo demuestran. A nivel mundial, cerca de la mitad de los jóvenes sobrevive con menos de 2 dólares al día, mientras más de 100 millones de adolescentes no van a la escuela. 16 millones de adolescentes se convierten en madres cada año y casi el 40% de las 6 mil 800 nuevas infecciones diarias por VIH/Sida le ocurren a gente joven.
El Consejo Nacional de Población reporta que la mitad de las entidades de la República tienen una proporción de población joven por debajo del promedio nacional (18.7%), y entre ellas se encuentran: Distrito Federal (16.3%), Nuevo León (17.4%), Tamaulipas (17.8%), Sonora (17.8%), Chihuahua (18.0%), entre otras. En general son entidades con una estructura por edad envejecida, ya sea por encontrarse en transiciones demográficas intermedias y avanzadas, como el Distrito Federal, o porque su población ha sido impactada por movimientos migratorios importantes en los cuales los jóvenes tienen una presencia crítica, como Baja California y Baja California Sur, produciendo en ellos un aumento en la edad promedio de la población.
En posición contraria se encuentra la mitad de las entidades que tienen una proporción de jóvenes por arriba del promedio nacional, como es el caso de Chiapas (21.2%), Quintana Roo (20.5%), Guerrero (20.2%), Oaxaca (19.9%), Querétaro (19.6%), Aguascalientes (19.2) y en general aquéllas que, ya sea por encontrarse en transiciones demográficas menos avanzadas (el caso de Aguascalientes), tener bajos niveles de desarrollo social o presentar movimientos migratorios importantes, tienen una estructura por edad más joven.
La Tasa de desocupación entre jóvenes (14 a 29 años) en el ámbito nacional es del 8.3 por ciento, 7.7% entre los varones y 9.4 entre las mujeres; en Aguascalientes la cifra aumenta a 11.1 por ciento, y a diferencia del país, en el caso de los hombres la tasa es superior a la de las mujeres: 11.7 y 10.2. Según la STPS-INEGI. Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, durante el primer trimestre del 2014.
Del total de ocupados en el primer trimestre del 2001 (hace trece años) el 13% correspondía a jóvenes entre los 14 y los 19 años de edad. En el 2014, esta proporción desciende a sólo 7%, lo que implica una mayor desocupación juvenil, dado que los asegurados al IMSS pasaron durante este lapso de 150 a 250 mil trabajadores.
El Coneval estimó en su último informe que, 14.9 millones de mexicanos, hombres y mujeres jóvenes, que representan alrededor del 14% de la población total, se encuentran en pobreza multidimensional. De éstos, 3.3 millones se consideran en pobreza multidimensional extrema. En el mismo cálculo, 12.1 millones de jóvenes eran vulnerables por carencias sociales, 1.5 millones eran vulnerables por ingreso y sólo 6.2 millones no eran considerados pobres multidimensionales ni vulnerables por ingreso o carencias sociales.
Los jóvenes que se encontraban en pobreza multidimensional tenían, en promedio, 2.7 carencias sociales. La clasificación de carencias sociales del total de jóvenes es la siguiente:
- 18.1 % presentan rezago educativo;
- 44.7 % no cuentan con acceso a los servicios de salud;
- 68.0 % no tenían acceso a la seguridad social;
- 18.1 % presentan carencia en calidad y espacios en la vivienda;
- 19.1 % no tenían acceso a los servicios básicos en el hogar, y
- 22.0 % no cuentan con acceso a la alimentación.
Las entidades federativas que tendrán una mayor tasa de fecundidad adolescente serán Coahuila, Chihuahua y Sonora con 86, 85 y 83 nacimientos por cada mil mujeres, entre los 15 y los 19 años de edad. Aguascalientes se calcula que en este 2014 presentará 72 por cada mil adolescentes, lo que significa cerca de los cuatro mil quinientos alumbramientos.
Los jóvenes varones se van a partir de su segunda década, muchos migran e incluso algunos mueren, pero el déficit nacional masculino para la tercera década ya asciende a cerca de medio millón y a 5 mil en Aguascalientes.
Se hace necesario, sin duda, “Invertir en las y los jóvenes”, y garantizar que sean incluidos como grupo poblacional prioritario en la agenda para el desarrollo.
Índice de masculinidad nacional y estatal al 30 de junio del 2014




