Vi un video de Pedro Kumamoto con el hombre sensación en la red, Chumel Torres y su programa del Pulso de la República. Ahí supe que lo del primer diputado independiente en el estado de Jalisco era algo raro, ahí supe que era de verdad, ahí supe que el tipo es un romántico.
Escuché varias críticas hacia Pedro Kumamoto y su movimiento, que si muy romántico, irreal, no sabe de política, no va a ganar. Y también muchos incrédulos incapaces de entender las candidaturas independientes, otros creían que Pedro al no tener el presupuesto de un partido político ni la estructura ni spots ni publicidad en camiones o espectaculares como sus contrincantes, que con esas carencias fuera a ganar y lo hizo.
Un estudio que realizó la UNAM sobre las campañas en redes sociales arrojó que el mejor contenido, el mejor manejo, la mayor influencia, número de seguidores respecto a sus contrincantes fueron las campañas de Enrique Alfaro en Guadalajara, El Bronco en Nuevo León y Kumamoto en el Distrito 10 local de Jalisco, los tres ganaron. Muchos afirman que las redes sociales aún no son determinantes, que pesa mucho la campaña a pie, la estructura y la movilización, no lo dudo ni lo menosprecio, sin eso no se ganan campañas, en el caso Kumamoto fue el candidato de su distrito que mayor cobertura recibió en radio y TV, un fenómeno mediático, también por eso ganó la elección, sin embargo, las redes sociales fortalecieron su proyecto, cosas que sus contrincantes no supieron hacer.
El discurso de los políticos es sencillo, leía en un post de la revista Forbes 6 consejos para formular el discurso perfecto entre los que se destacan tener una estructura seria, contar una historia, motivar, ser conciso y algunas otras características. La lista la hizo la persona que le hace los discurso a Obama, quizá los mejores discursos de la era moderna, les recomiendo pongan en Youtube bajo la lluvia, Obama y escuchen los discursos, si no lloran o salen convencidos de votar por él, serían unos mentirosos. De esos discursos hay pocos, en México habitan discursos sin concisión, sin historia, sin objetivo, sin emociones, sin realidad, hay discursos, como muchos los llaman, demagógicos.
Esos discursos son los discursos llenos de falsas promesas y esperanzas, falsas expectativas. “Yo le prometo, señora, que conmigo va a tener su casa” ¿Qué facultades tiene un presidente municipal para dar casas? Ninguna. Sin embargo, prometer no empobrece como dicen. Un amigo muy cercano me decía que en los pueblos, un número importante en México de población vive en un pueblo, la gente se cree todo. Les prometen que va a llover más en su gobierno y se lo creen, les prometen que van a traer vacas inmortales y se lo creen. Hay culpa compartida, más de los políticos que de los ciudadanos.
Los discursos de los políticos son vacíos, llenos de estudios de planeación, la Reforma Fiscal, palabras elevadas e incomprensibles para la mayoría o mentiras que todos entienden pero son irrealizables. A los políticos les gusta hablar ante los medios y que le pongan su título nobiliario, les gusta ser reconocidos en las calles. Les gusta salir en las portadas y en las noticias. Comer en restaurantes de parrilla argentina y beber botellas de veinte mil pesos, por el gusto del sueldo. Los políticos hablan de negocios con los hombres de negocios, usan el erario público para beneficiarse, protegen a sus amistades y hacen justicia a los suyos no a todos.
Sin embargo, al ver la entrevista de Pedro Kumamoto supe de lo que he estado convencido tanto tiempo, conocí a Pedro un par de veces y lo escuché hablar de las instituciones, los injustos procedimientos para obtener una candidatura y algunas otras críticas, conocí a algunos miembros de su equipo cercano y estaba convencido que en ellos había algo que en los políticos no hay.
No sabía que era, la verdad pensaba que Pedro iba a terminar siendo corrompido por el poder y el dinero, tengo mis dudas sobre el futuro, sobre cómo soportar la presión de los partidos que necesitan su voto para conseguir una mayoría. No logro entender lo que es el fenómeno Kumamoto, no la había visto antes, para nosotros los mexicanos los políticos son desagradables y nada deseables, sin embargo, Pedro encarna lo que aquí escrito tantas veces, la política tiene un fin positivo.
En la entrevista, Kumamoto habla de que estará siempre con los ciudadanos de a doble tiempo, medio en el Congreso y medio en la calle. Que sus victorias más grandes serán implementar mecanismos de participación ciudadana, hacer una democracia participativa, es su obsesión, que sus más de 57 mil votos se vean representados en cada decisión que tome en el Congreso, hay algo en Pedro que no entiendo que me hace confiar, es difícil confiar en un político.
Hoy hay una diferencia muy grande, los políticos y Kumamoto, los primeros hacen que los ciudadanos se alejen de la política, el segundo logra que los ciudadanos aspiren a participar. Más como Kumamoto.
@pochaquito
